Idealistas, ingenuos, locos, etc., son adjetivos calificativos que muchas veces se le imponen a la gente que se atreve a desafiar lo establecido, aquellos que sueñan y luchan para que las cosas cambien para bien. Los mismos que no les gusta ver tanta injusticia, hombres y mujeres que saben que se necesitan más que palabras para generar mejoras en nuestro entorno.

En el caso de nuestro país, sabemos vivimos en un estado democrático pero que a su vez los poderes establecidos no gustan de que se ejerza plenamente el derecho de libre expresión y mucho menos cuando son críticas asertivas al sistema. Tratan de mantener el estatus quo acorde a las conveniencias de aquellos que detentan el poder y que gustan tener quietos y/o mantener a raya a los disidentes.

Claro que han existido avances y eso se aplaude pero también es una lástima ver que somos de los países con mayor incidencia de violencia y ni se diga en el caso de la violencia hacia los miembros de la prensa que se atreven a alzar la voz y exponer lo que mal se hace. En todos los ámbitos vemos casos de injusticias que se toleran y otros tantos que se alientan.

Es una parte de nuestra sociedad que a su vez tiene un arraigo fuerte en nuestra idiosincrasia, tan así que a veces pareciera el mundo al revés, se tolera mucho más las malas acciones y se deja de proteger a aquellos que luchan para acabar estas. No es pregonar para nada la perfección, ni ser tan ingenuo como para pensar que esto se acabará de la noche a la mañana, simplemente es saber que rendirse no debe de ser nunca la opción.

Lo que sí es ser muy conscientes que aquello que dejemos de hacer, es aquello que estamos dejando crecer más. Por ello aplaudo el esfuerzo de los que a pesar de tantas adversidades no dejan de luchar, ese grupo de personas que en muchas ocasiones llegan hasta sufrir de más pero que aún envueltos en grandes dificultades no se rinden.

Héroes sin capa y muchas veces hasta con más enemigos que Superman, Batman y la mujer maravilla juntos, pero que con su resiliencia generan una genuina esperanza de cambio positivo que tanto se necesita. Mi más sincero respeto y admiración para todos ustedes, nuestro país y nuestro mundo se ven beneficiados gracias a su inquebrantable fuerza de voluntad.

“Hay muchos fracasos que llegan por no darse cuenta lo cerca que está el éxito” 

Jorge Alonso Infante Alarcón  

Carrera Licenciado en Relaciones Internacionales.

Maestría en Administración Pública en la U.A.M. Francisco Hernández García (U.A.T.)