Berlín, Alemania, (Agencia Informativa de México).- El presidente del Bundestag (Congreso alemán), Bärbel Bas, aseguro que “no puede haber un golpe final” y lo que se requiere es que Alemania necesita una cultura viva del recuerdo al inaugurar la ceremonia conmemorativa del 78 aniversario del Holocausto.

Señaló que le preocupan los intentos de relativizar la singularidad del Holocausto, “tenemos que rechazar eso resueltamente”, resaltó en su mensaje en el pleno del Bundestag durante la hora conmemorativa de las víctimas del nacionalsocialismo, a la que acudió el canciller Olaf Scholz.

El presidente del Bundestag lamentó que las personas que eran perseguidas por los nacionalsocialistas por su orientación sexual o identidad de género tuvieran que luchar durante mucho tiempo para ser reconocidas como víctimas.

En el Día Internacional del Recuerdo del Holocausto, el Bundestag conmemoró a las víctimas de la tiranía nacionalsocialista y es que la conmemoración de este año estuvo especialmente dedicada a las personas que sufrieron persecución a causa de su orientación sexual o identidad de género.

Hace 78 años, el 27 de enero de 1945, fue liberado el campo de concentración y exterminio de Auschwitz-Birkenau. Auschwitz es representativo de los muchos lugares donde millones de personas, en su mayoría de fe judía, fueron maltratadas y asesinadas durante el régimen nazi de injusticia.

El discurso conmemorativo estuvo a cargo de Rozette Kats, quien nació en 1942 en el seno de una familia judía, y quien sobrevivió al Holocausto con una pareja no judía en Amsterdam mientras sus padres biológicos fueron asesinados en Auschwitz.

Rozette Kats describió cuán dolorosa fue para ella la supresión constante de su identidad judía. Por lo tanto, es muy importante para ella que aquellas víctimas del nacionalsocialismo que no pudieron mostrar abiertamente su orientación sexual o identidad de género en ese momento sin temer por sus vidas también sean recordadas adecuadamente.

Durante la ceremonia, se recordó a dos personas que fueron acusadas por los nacionalsocialistas de tener una orientación sexual “reprobable” y fue la actriz Maren Kroymann quien leyó un texto biográfico sobre Mary Pünjer quien era hija de una familia de comerciantes judíos de Hamburgo.

“En 1940, como mujer casada, fue arrestada y condenada como “lesbiana” bajo el pretexto de “asociación”. Fue deportada al campo de concentración de Ravensbrück y asesinada en la cámara de gas del campo de exterminio de Bernburg (Saale) en la primavera de 1942”, recordó.

En tanto el actor Jannik Schümann leyó un texto sobre Karl Gorath, quien fue condenado por primera vez en 1934 en virtud del artículo 175 del Código Penal, que penalizaba los actos sexuales entre hombres. Tras otro informe en 1938, fue condenado a tres años de prisión.

Después de cumplir su sentencia, fue puesto bajo “custodia policial preventiva” en el campo de concentración de Neuengamme cerca de Hamburgo en 1943 y deportado desde allí al campo de concentración de Auschwitz en junio de 1943.

“Tras su liberación del campo de concentración de Mauthausen, fue condenado en Bremen en 1946 por el mismo juez que ya lo había castigado en 1938. El párrafo 175 del Código Penal solo se debilitó en 1969 y solo se eliminó en 1994 sin reemplazo”, señaló el actor.

Klaus Schirdewahn, quien fue arrestado en 1964 bajo la Sección 175 del Código Penal, tomó la palabra, como parte de los discursos conmemorativos y resaltó la importancia de recordar a las minorías sexuales perseguidas por el nacionalsocialismo. Incluso hoy en día todavía es difícil para muchos vivir libremente su identidad de género.

Para transmitir la conmemoración activa de las víctimas del nacionalsocialismo a las generaciones más jóvenes, el Bundestag organiza un encuentro de jóvenes. En este contexto, los jóvenes visitan el sitio conmemorativo de Ravensbrück y participan en debates y talleres. Además, el Bundestag muestra en una exposición objetos pertenecientes a personas que tuvieron que huir del terror de la dictadura nacionalsocialista.

En 1996, el entonces presidente federal, Roman Herzog, introdujo el 27 de enero como un día para conmemorar a las víctimas del nacionalsocialismo. Desde 1996 ha habido un servicio conmemorativo anual para las víctimas del nacionalsocialismo en el Bundestag alemán.

En 2005, las Naciones Unidas declararon el 27 de enero Día Internacional de Conmemoración de las Víctimas del Holocausto. Con el hashtag #WeRemember, personas de todo el mundo expresan su compromiso de recordar el Holocausto.