Tampico, Tamaulipas.- La crisis del agua se sigue agravando en Tampico, al grado de que las compras de pánico han generado el cierre de negocios expendedores del vital líquido, pues simplemente se les agotó, "pareciera que se va acabar el mundo", dijo una vendedora en la colonia brava de El Cascajal.

La salinidad del agua de la llave ha generado el temor, de que se llegue al punto de que en la zona se registre algo nunca antes visto, el desabasto de agua para consumo humano, situación que se ha alentado también por rumores.

Desde la tarde-noche de ayer, en varios negocios se comenzó a observar filas de personas con dos, tres, diez e incluso camionetas con hasta 30 garrafones de 20 litros.

"Yo abrí a las ocho de la mañana, a esa hora llegó la pipa y ya tenía gente haciendo fila, es algo impresionante porque en menos de dos horas se terminó el agua, y no hay fecha para que vuelvan a traer", puntualizó.

Algunas empresas dedicadas a la venta del producto de primera necesidad, han exhortado a la población a evitar las compras de pánico, sin embargo, también se reconoce que están trayendo el agua de Veracruz, pues la de la zona se encuentra contaminada con sal.

Mientras se platica con la vendedora de agua, al sitio llegan varias personas con sus garrafones vacíos, se sorprenden al ver el anuncio de "no hay agua", y comienzan a buscar en las tiendas de las esquinas, donde tampoco hay.

Hay reportes que los camiones de las empresas que se encargan de repartir el agua están siendo interceptados en colonias, y la gente les compra los garrafones.

También se ha incrementado el costo del botellón, superando los 20 pesos, con una veintena de litros de agua purificada.