Laredo, Texas.- Los líderes locales de todo Texas lanzaron severas críticas al  gobernador Greg Abbott por ignorar las recomendaciones de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) y poner en riesgo la vida de millones de ciudadanos de la entidad, al dar la orden de abrir comercios y  eliminar el uso de cubrebocas.

La crítica hacia Abbot ha sido sentida y severa, por quienes son detractores del mandatario republicano, por lo que incluso se declara como sentencia de muerte por algunos.

“Una sentencia de muerte para los texanos. Añádalos a los más de 44 mil muertos cuando no pudo hacer frente a la pandemia y arruinó el lanzamiento de la vacuna. Y aquellos que murieron congelados porque a él le importan más las ganancias de las compañías de energía que mantener vivos a los texanos. Abbott está matando a la gente de Texas", dijo el activista demócrata Beto O’Rourke.

El presidente del Partido Republicano en Texas, Julián Castro, indicó que este movimiento es más político y que no tiene bases científicas.

“Esta decisión no tiene ninguna base científica. Es un movimiento político desesperado, de un político que teme haber perdido mucho apoyo después de su incompetencia con la reciente tormenta invernal. Costará vidas ", aseguró Castro.

La representante Sheila Jackson Lee, se dijo decepcionada, ya que Texas sigue con una alta tasa de contagios.

"Estoy más que decepcionada y, de hecho, sorprendida por la eliminación de los mandatos de COVID-19 en el Estado de Texas, que durante muchas semanas ha sido un punto caliente para el COVID-19", dijo.

En ese mismo punto coincidió el representante texano Joaquín Castro, quien dijo que el gobernador no respeta y escucha a los médicos.

"El hecho de que el gobernador Abbott no escuche los consejos científicos y médicos les costará la vida a los tejanos. Esta decisión es imprudente y peligrosa, y una distracción desesperada del incumplimiento del deber del gobernador durante los cortes de energía. Él está poniendo la política por encima de la gente de Texas ", dijo Castro.

De esta manera los representantes y líderes demócratas, hacen presión hacia Abbot por esta decisión, no solo de abrir los comercios, sino de eliminar el uso de cubrebocas.