Nuevo Laredo, Tamaulipas .- La clausura de nueve estaciones de gasolina en Nuevo Laredo, Tamaulipas, fue justa y en estricto apego a la ley, aseguró el titular de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Ricardo Sheffield Padilla.

Señaló que el operativo en 12 establecimientos se realizó por una queja que presentó el gobierno de Tamaulipas, ante la discriminación en la venta del combustible.

“Nadie puede ser discriminado. Si tú tienes un negocio abierto al público, cualquiera puede llegar”, aclaró el funcionario federal, al descalificar el argumento de las gasolineras sobre la falta de convenio o contrato con las autoridades públicas del estado.

Respecto a la posible amenaza a estaciones de servicio por parte del crimen organizado, Sheffield Padilla desestimó ese dicho por parte de los propietarios y afirmó que hasta ahora no hay una sola denuncia penal sobre esos presuntos hechos.

“Si están argumentando amenazas del crimen organizado, dónde está la denuncia penal”, comentó tras participar en el foro “Empoderando al consumidor en la contratación de servicios de telecomunicaciones”, realizado en la Secretaría de Economía.

“Si presentaron una denuncia en tiempo y forma ante la Fiscalía General de la República o la Fiscalía General del Estado de Tamaulipas habría que analizar bajo otra óptica, pero por lo menos de las nueve que verificamos y clausuramos no hay tal”, insistió.

Sheffield Padilla sostuvo que las nueve gasolineras clausuradas podrían reabrir en dos o tres semanas si pagan la multa asignada por incurrir en dichas faltas y se comprometen a evitar realizar prácticas discriminatorias, y “si no les interesa pueden quedar cerrados permanentemente”, finalizó.