Matamoros, Tamaulipas.- Estados Unidos cerrará las fronteras si no hay tranquilidad, esta información les fue confirmada a los obispos de Nuevo Laredo, Matamoros y Piedras Negras, quienes sostuvieron una reunión donde llegaron a la conclusión que las caravanas de migrantes son un reto para las autoridades y la sociedad, expresó Eugenio Andrés Lira Rugarcía.

El obispo de la Diócesis de Matamoros precisó que esta situación es también una oportunidad para ejercer la solidaridad y crecer en humanidad, por lo que invitó a todos, a que sumen esfuerzos para tender la mano a los hermanos migrantes.

Conminó a la ciudadanía a prepararse con alimentos, agua y ropa; asimismo se comprometieron a convocar a personas para que ayuden en los lugares a donde lleguen y se les apoye dando lo que les corresponde; citó como ejemplo a los sacerdotes que deben ir a celebrarles misa, confesarlos, atenderlos y escucharlos, pues traen consigo situaciones muy dolorosas.

Apuntó que en Tijuana el recibimiento de la ciudadanía no ha sido cálido, pues sienten que esa presencia migrante les genera dificultades, y es aquí donde citó el riesgo que existe de que si quieren ingresar de forma violenta a Estados Unidos, que fue lo que les advirtió la Patrulla Fronteriza (Border Patrol), van a cerrar los pasos fronterizos.

Esta situación pudiera generar consecuencias en la vida social y económica de ambos lados de la frontera, y está confirmado, porque les han dicho que de forma violenta no van a recibir a nadie, ni de manera ilegal, dijo Lira Rugarcía.

Puntualizó que aún y cuando los migrantes han manifestado que no cruzarán por Tamaulipas por temor a la violencia, aquí estarán preparados por si toman otra decisión, las casa del migrante de la Diócesis (Reynosa y Matamoros) siguen funcionando, y así habrán de continuar.