Tampico, Tamaulipas. - Un ingeniero petrolero de Tampico que venció al cáncer tras someterse a diversas quimioterapias, ahora lucha contra Petróleos Mexicanos (Pemex) para ser reubicado a su área de trabajo.

Se trata de Ignacio Villalobos Cisneros, quien prácticamente ya había sido desahuciado por médicos del Hospital Regional de Pemex de Ciudad Madero, que hoy pelea en los tribunales laborales.

El trabajador de la Refinería "Francisco I. Madero" recordó que le fue diagnosticado en el 2015 un sarcoma maligno en la fosa nasal izquierda, que se extendió hacia el cuello y pulmón, diagnóstico emitido por el oncólogo del servicio médico de Pemex, Rubén Valle Chantack.

El pronóstico de supervivencia para Villalobos Cisneros era del uno por ciento, por lo tanto, a su esposa y su madre les dijeron que debían prepararse para lo peor.

“Dijeron que yo iba a morir, pero me aferré a la vida, me aferré a la posibilidad de ser padre, me habían dicho que no iba a llegar a ver a mi hija a nacer”, cuenta Villalobos Cisneros.

Como el Hospital Regional de Pemex no contaba con el equipo médico para sus valoraciones y tratamiento, el petrolero decidió acudir al servicio particular y durante los tres años de curación tuvo 38 radiaciones y 16 quimioterapias, además valoraciones médicas entre pública y privada en Ciudad Madero, Nuevo León y Ciudad de México.

El 13 de octubre de 2016 el perito de Pemex, David Roberto Cisneros Alemán, finalmente le dictaminó que no sanaría, pero Villalobos en aquel tiempo padre de una niña de cuatro meses de nacida, lejos de desanimarse, seis días después estaba corriendo una carrera atlética.

Desde entonces enfrenta no solo las secuelas menores del cáncer, sino también el comportamiento deshumanizado de los médicos de Pemex y del área de Recursos Humanos de la paraestatal, pues debido al dictamen médico perdió sus derechos laborales y no percibe salario alguno desde el 14 de febrero de 2017.

Está situación lo ha llevado a la ruina de su economía familiar, obligándolo a vivir pidiendo prestado entre familiares y amigos, con lo que la vida en el seno familiar ha sido más complicada en la actualidad que durante los peores momentos del tratamiento, entre quimioterapias y radiaciones.

“Saber que ya no tienes cáncer es revivir, saber que ya no tenía células malignas es una nueva oportunidad, pero la guerra emocional, los intereses del Hospital y el ego médico decidieron no reubicarme, argumentando que aún estoy enfermo”, precisó el ingeniero petrolero.

En este momento, Villalobos Cisneros sigue bloqueado por las omisiones médicas y administrativas de Pemex, y está confiado que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social resuelva a su favor la demanda laboral cotejada bajo el expediente 1063/2017 en la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, número 39, la cual está en desahogo de pruebas, esperando que un perito tercero emita su dictamen.