“Cuando vinieron, ellos tenían la Biblia y nosotros teníamos la tierra. Nos dijeron -¡cierren los ojos y recen! Cuando abrimos los ojos, nosotros teníamos la Biblia… y ellos tenían la tierra”. Anónimo.

LO CLARO. Con la conferencia magistral de José Narro Robles, secretario de salud de México, se reunieron los rectores de las principales universidades del país, en la LI reunión ordinaria del Consejo de Universidades Públicas.

La oportunidad de engarzar los temas de mejoras a la educación superior en los estados de la nación, sumando esfuerzos gubernativos de cada entidad, fue el marco idóneo para que el órgano colegiado de instituciones como ANUIES, CUPIA, donde tiene asiento la Universidad Autónoma de Tamaulipas, el IPN, coordinados por la SEP y la presencia de Rodolfo Tuirán subsecretario de educación superior, construyen acuerdos que posibilitan a los académicos e investigadores a aportar soluciones a los problemas nacionales.

La razón de la existencia de la educación superior.

LO OSCURO. Cheque usted éste dato.

El imperio azteca (la triple alianza) dominaba la zona central mesoamericana. Respecto del año 1519 aún es difícil precisar su censo poblacional.

Sin embargo, la cabecera gubernamental Tenochtitlan sumaba entre 250 y 300 mil habitantes y se presume, en el Valle de aquél México se podrían precisar al menos a 7 millones de indígenas.

La ciudad europea de mayor portento de aquellos años –en comparación- era Venecia, que contabilizaba apenas arriba de cien mil.

Moctezuma, ‘Señor sobre todos los señores’ gobernaba con mano dura sobre varias muchas comunidades que integraban ese reinado.

Tampoco se ha podido establecer el tamaño de su poderoso ejército.

Para esas fechas, tuvieron la guerrera visita de Hernán Cortés al frente de un regimiento de 400 soldados españoles. Pausa… así es; cuatrocientos hombres, que caben en diez autobuses. ¡A conquistar una nación que se llegó a sugerir era de 25 millones de personas! Es la cantidad de personas que hoy habitan Texas.

Resumen de la historia.

Cortés logró vencer al gran tlatoani Moctezuma, que sucumbió por la traición de sus gobernados (tlaxcaltecas y mixtecos entre otros) y pereció lapidado.

Sí, a pedradas del ‘fuego amigo’. No fue a manos de Cortés ¿Ganó el invasor?

El movimiento de regeneración nacional -perdone la comparativa absurda-, no tendría una estructura formal en ninguno… ninguno de los estados del país que en la reciente elección dieron el formal triunfo a la propuesta del hoy presidente electo.

Sea su plataforma política buena, muy buena o por verse, no sería la razón el haber orientado la preferencia de elección a su persona.

Ya sobran hoy malquerientes que señalan hechos extraños.

Como bodas suntuosas que emulan a lo mismo que criticaban de los excesos que permeaban a la antigua democracia (la de Peña).

Tampoco hay muchos contentos con los nombramientos de dinosaurios enquistados en posiciones como la administración de la luz, por mencionar algunos.

Sin embargo, la historia documentada de aquél imperio de 25 millones de almas que luchó contra 400 y fue vencido, emula hoy al mismo tenor, que basta tener un pueblo herido para unirse a quien con apenas un par de caballos deseara aplastar de una buena vez a lo que por casi un siglo le obligó a aceptar y callar excesos.

Un gobierno que sólo cambiaba de personajes y de nombre –desde el 2000- pero que terminaban casados entre ellos.

Por el bien de los que gobernarán… no perder de vista lo que en realidad mueve a la nación. Siempre habrá otro Quetzalcóatl y más y mayor ‘fuego amigo’. Dispuestos a aventar la primera piedra.

COLOFÓN: Elba Esther… ¿la malinche? ¡Válgame el Señor!

alejandrodeanda@hotmail.com

@deandaalejandro

HECTOR ALEJANDRO DE ANDA CORTEZ

Colabora en medios impresos y en portales informativos electrónicos. La Columna Claroscuro se publica desde 2007

La columna Claroscuro se publica desde el 2007 en los mismos medios, trisemanal.

Especialmente tocamos temas económicos y de política en general.