Edinburg, Texas.- Un total de cuatro agentes de la Patrulla Fronteriza, del sector del Valle del Río Grande, fueron agredidos en cuatro incidentes por separado, cuando realizaban patrullajes de vigilancia, resultando con lesiones leves. 

La primer agresión se registró el 19 de abril, cuando un agente de Fort Brown patrullaba el río Bravo cerca de Brownsville, Texas, siendo fue golpeado por una piedra en el cofre de la unidad. El agente llevaba un chaleco antibalas en ese momento y no resultó gravemente herido.

Por otra parte, 18 de abril un agente de Fort Brown observó que un sujeto ingresaba ilegalmente a los Estados Unidos cerca de Brownsville, Texas. El sujeto se volvió combativo y se produjo una escaramuza cuando el agente intentó atraparlo. 

El ciudadano guatemalteco fue sometido y se determinó que había sido previamente repatriado. El agente fue tratado por lesiones menores sufridas durante el asalto.

Más tarde esa mañana, un agente de Harlingen se encontró con un grupo de cinco inmigrantes ilegales cerca de Norias, Texas. 

El agente intentó detener a uno de los sujetos que de inmediato comenzó a resistirse al arresto. Cuando el agente intentó obtener el control del sujeto, un segundo extranjero ilegal lo agarró por la espalda en un intento de dominarlo. El agente pudo obtener el control de ambos sujetos y los puso bajo custodia.

La semana anterior, los agentes de Rio Grande City frustraron un intento de contrabando cerca de Roma, Texas. Cuando los agentes tomaron a los inmigrantes ilegales bajo custodia, uno de los sujetos se resistió al arresto y mordió al agente que lo detuvo.

"Nuestros agentes están capacitados para enfrentar una gran variedad de situaciones", dijo el Jefe de Patrullas Manuel Padilla, Jr.

"Si bien estos ataques pueden interpretarse como actos de desesperación, cualquier ataque contra nuestros agentes es inaceptable", concluyó.