Nuevo Laredo, Tamaulipas.- Juan de Dios Juanes Carrizalez, el candidato más joven de la contienda electoral a la diputación federal por el primer distrito de Tamaulipas, sigue sumando votantes, gracias a su estilo franco, valiente y honesto, de decir y proponer su visión de país.

Este jueves realizó una caminata por la colonia Colinas del Sur, donde no sólo jóvenes, sino personas de todas las edades salieron a dialogar con él y a manifestarle su apoyo.

Y es que Juan de Dios reconoce que la política tradicional ya no responde a las expectativas de los ciudadanos, y conoce de voz directa de la ciudadanía, qué es lo que quiere, qué es lo que espera.

“Estamos realizando una campaña de mucho diálogo con la gente, de escuchar necesidades, reclamos, señalamientos y también propuestas, ideas, esperanzas”, dijo el abanderado priista.

Indicó que no es una sorpresa encontrarse con el hartazgo de la gente con la política tradicional, de la tristeza de sentirse agraviados al no encontrar respuesta a sus necesidades, pero sí es un síntoma indicativo de que ante este sentimiento general, las cosas deben cambiar.

“Nos da mucho gusto que no sólo estamos recibiendo el apoyo de los jóvenes, de nuestra generación, sino de hombres y mujeres padres de familia, trabajadores, adultos mayores; gente que encuentra en nuestras propuestas una coincidencia con lo que desean para Nuevo Laredo, para el distrito uno”, dijo.

Esas coincidencias, refirió, son las de impulsar acciones que se vean reflejadas en los bolsillos, en las mesas, en las calles de todos. Poder adquisitivo en los salarios, acceso a alimentos y medicinas sin que represente un sacrificio brutal para los trabajadores, fuentes de trabajo bien remunerado, seguridad en las calles y en los hogares.

“Y eso puede lograrse. No con promesas vacías, sino con una agenda de trabajo clara, transparente y que entienda la gente de manera sencilla, por eso les explicamos qué queremos y cómo vamos a conseguirlo”, señaló.

Juan de Dios fue directo, contundente: “vamos a pugnar por la congruencia entre políticos y sociedad. No es posible ya, sostener a una clase política llena de privilegios, mientras el pueblo, al que se deben, sigue en crisis económica. Eso se logra fortaleciendo el estado de derecho, las leyes, y eso hace un diputado federal principalmente, crear un cuerpo de leyes justas y aplicables”.

Y ese es uno de los principales compromisos de Juan de Dios, porque dice estar convencido que un país donde la justicia sea igual para todos, es el principio de un verdadero tránsito a una vida productiva y de progreso para todos.