Morelia, (Notimex).- Como Cocinera Tradicional de Michoacán, la originaria de Uruapan, Carmen Vidales, tiene el objetivo preservar los sabores de su región para que los habitantes crezcan sanos y saludables.

“Cocino como lo hacían nuestros ancestros, en fogón de lumbre que permite que la comida conserve su sabor natural. Cada ingrediente que utilizo es completamente natural, como el maíz con el que hacemos nuestras tortillas, nosotros lo producimos porque no queremos que lleve tanto fertilizante ni químicos, que es lo que le hace mal a la gente”.

Para Carmen, es incomparable el sabor de un caldo de pollo, de res, de un churipo, un mole o nacatamal, con el de una hamburguesa o pizza. En entrevista con Notimex, lamentó que los padres les den a los niños ese tipo de comida rápida que no brinda nutrientes ni nada.

“Si se fijan, nuestros antepasados duraban añales, arriba de 90 años y a esa edad todavía hasta caminaban y trabajaban como si nada. Ahorita ya no es así. Si usted le pregunta a un niño de 6 o 7 años si prefiere comer un churipo o una pizza, eligen pizza, y los papás, en lugar de darles cosas naturales, que nutran su cuerpo se les hace fácil darles ese pan de pizza en lugar de un caldito, es por eso que los chamacos se enferman”, indicó.

Al no consumir desde pequeños la variedad de nutrientes que se requiere, “los jóvenes llegan con un montón de enfermedades y al final, culpan al picante, dejan de comer salsa que porque tienen gastritis y no es así, imagínese que dejáramos de comer nuestros chiles, pierden sabor nuestras comidas”, resaltó.

Vidales Murguía, quien es una de las pioneras de los Encuentros de Cocineras Tradicionales de Michoacán, en los que ha ganado cuatro premios: dos en atole, uno en nactamal y otro en Platillo de Innovación con su mole de nuez de macadamia, le dio gracias a su abuela paterna por enseñarle todo lo que sabe.

“Mi abuelita Nicolaza Morales me enseñó a cocinar, no sé de donde le salía tanta sabiduría pero todo le salía bien. Me enseñó con una calma, paso a paso. Lo hacía con amor y paciencia, nunca tuve un regaño de ella, me explicaba, lo probábamos y si hacía falta algo se lo agregaba.

“Me siento orgullosa de ser una cocinera tradicional porque además de preparar cosas deliciosas, todo es saludable. También porque de mi comida me he mantenido. La gente paga por mi mole, churipo, corundas, así que de ahí yo como y calzo”.

Al preguntarle sobre de qué platillo se siente más orgullosa, señaló que de su Mole de nuez de macadamia, el cual: “en lugar de llevar espesuras de maíz, de harina, se espesa con la pura nuez”, explicó.

“Después se le ponen varios chiles diferentes, pimienta, ajo, todo eso para la espesura, aunque el ingrediente principal es la nuez, la cual solamente se da en los alrededores de la región de Uruapan”, agregó.

Carmen Vidales tiene su cocina en Uruapan, atrás del parque La rodilla del diablo (Anillo de Circunvalación #13, Col. La Quinta), donde la gente puede conocer sus recetas purépechas o solicitar una comida para eventos como bodas y bautizos.