Como si presagiaran que Pepe Meade ya está derrotado, sin empezar la campaña, los priistas vistieron de luto

Atrás quedaron el rojo pasión y el verde esperanza…

El mismo dirigente Sergio Guajardo usó un chaleco negro… el senador Manuel Cavazos Lerma fue de los pocos que mostró un rojo desteñido, mientras que Edgar Melhem un verde opaco.

José Antonio Meade usó un color que muestra el temor de no crecer en la carrera presidencial.

El café, que según la psicología de los colores es opaco, sin brillo y denota tristeza, desmotivación y lo insípido.

Y en su discurso, quedó en eso, habló de lo que les duele a Tamaulipas.

“Tamaulipas ha sido lastimado por una crisis de inseguridad, son muchas las mujeres que no salen tranquilas de sus casas son muchas las madres que se preocupan que, si sus hijos van a regresar con bien”, dijo.

También se refirió a los criminales….

“Vamos hablar de la necesidad que a crimen igual corresponde castigo igual, vamos hablar de la necesidad que no encuentren refugio los delincuentes”, añadió.

Pero cuando le tocaron el tema de los gobernadores tamaulipecos detenidos, su historia se separó y mucho de lo que hace.

“Me parece que hay que hacer respetuosos de ese proceso de deslinde de responsabilidades”, respondió a los reporteros que lo cuestionaron.

Eso sí, hubo muestras que allí sigue el PRI, esperando que alguien los venga a emocionar y rescatar del olvido o del tercer lugar en las encuestas.