Mientras en el ambiente pantanoso y superficial de las campañas presidenciales, flotan los calificativos, de una cultura política demasiado pobre de contenidos, y vasta en verborreas viscerales, y sin sentido, las calles del país siguen secuestradas por la imparable violencia.

Pero lo peor es que, el candidato presidencial del PAN, Ricardo Anaya, está medrando con el dolor de la república, tratando de sacar raja política de una coyuntura legislativa, donde lo que menos les importa es la ciudadanía,

La Ley de Seguridad Interior, está siendo objeto de un ataque masivo, por parte de los partidos opositores.

Irremediablemente, la polémica estrategia constitucional  del gobierno peñista contra el crimen, cuestionada, tanto por organismos nacionales, como internacionales, ha caído en la vorágine de los intereses político-electorales.

El golpeteo principal contra la Ley de Seguridad Interior, de la cual, la sociedad mexicana, no sabe gran cosa, se está dando básicamente, desde el PAN, el PRD y el Movimiento Ciudadano, los tres partidos del llamado México al Frente. Son estas fuerzas, las que ahora están reviviendo mediáticamente  el tema, por la vía de un recurso de inconstitucionalidad ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

Suceda lo que suceda, el golpe político contra el gobierno peñista ya está dado, y pone en evidencia la cada vez más debilitada imagen de un sexenio, que tiende a concluir, justo como empezó: en medio de cuestionamientos y tempestades  sociales.

Parece ser tan endeble la herramienta legal para apaciguar el país, y librarlo de su baño de sangre, que las mismas fuerzas armadas se aprestan a hacer política de convencimiento ante la sociedad civil, buscando persuadir a los ciudadanos, de que la ley es benigna, y no contiene las aberraciones que se le imputan.

Aquí, en el estado, en la región del sur, recientemente se anunció que, miembros de las fuerzas armadas, han convocado a sectores de la sociedad  civil, para explicarles en torno al contenido de la ley. Es decir, el ejército está haciendo  la tarea, que partidos  como el PAN, el PRI, o el PRD no están llevando a cabo, pues en lugar de informar a los ciudadanos, solo viven de ellos.

Hablando de este espinoso tema, vale la pena recordar que, el gobierno panista de Francisco García  Cabeza de Vaca, respaldó en su momento, a través de sus legisladores, la aprobación de esta ley.

Sin embargo, el jefe máximo del panismo, y actual candidato presidencial, Ricardo Anaya está buscando revivir el asunto, y trata de asestarle al sexenio de Enrique Peña  Nieto, una derrota por la vía constitucional ante el Poder Judicial de la nación, lo cual le redituaría, bonos políticos, en sus ambiciones del poder.

Anaya trae su propio juego maniqueo, y de revancha contra el gobierno federal, pero en ello, se está llevando entre las patas a los militares, y está jugando a contra corriente de sus mandatarios estatales panistas, que  institucionalmente necesitan  del apoyo del ejército. Y desde un inicio han validado la nueva Ley de Seguridad Interior.

En resumidas cuentas, aquí lo que no se vale, es usar como rehén la ley de seguridad, para llevar agua a su molino electoral.   

¿Qué si es posible que la Ley de Seguridad Interior, adolece de fallas?, tal vez; que si vulnera los derechos humanos?.. También; que si empodera a las fuerzas armadas? es probable. En todo caso, la responsabilidad es de los partidos y de sus representantes populares, que no han informado a la sociedad, y se la pasan viaticando, como castas privilegiadas del presupuesto.

Y para rematar:

¿Por qué los diputados del PAN aprobaron la ley en su momento, o de plano faltaron a la sesión, y  ahora aprovechan la efervescencia del escenario electoral, para revolver el agua?   

Obviamente, estamos ante una nueva C..Anayada.

-----UNA SEMANA PARA LOS DESTAPES AL SENADO, EN EL PRI--

Se dice que, el próximo 27 de este mes, es la fecha para la postulación de los candidatos priistas al senado de la república. Este sábado, sería la hora de los abanderados externos, del estilo de Meade, o se de los llamados simpatizantes, pero aquí en Tamaulipas, no se sabe de ninguno. Al menos que los Vientos, quieran meter un gol…y se los permitan.

La nueva zancadilla contra la LSI, está contando con el respaldo de algunos gobernadores panistas y del PRD, que apenas en abril del año pasado urgían al Congreso, para que aprobara la ley, invocando el válido argumento de que, solo las fuerzas militares podían garantizar la seguridad en sus estados.

Fernando Acuña Piñeiro

Egresado de la Escuela de periodismo en la UAT.

Ingresó al periodismo desde 1985. Ha colaborado  como  reportero y columnista, en los principales diarios y portales  de Tamaulipas, (Expreso de Victoria, La Razón de Tampico, Expreso Matamoros,  Diario de Tampico, Reporteros en la Red y Gaceta, entre otros.