Para todos es sabido que la capital tamaulipeca aglutina la mayor cantidad de burocracia en la entidad, la burocracia capitalina también ocupada más del 80% de las posiciones de 3 y niveles subsecuentes. Pero después del inicio del nuevo milenio, las cosas han cambiado; la llegada de gobernantes de otras ciudades, sobre todo de Matamoros, muchos también llegaron a ocupar, posiciones que antes eran solo para victorenses.

Las cosas cambian, los tiempos llegan y se van, nadie es eterno, la política ha cambiado, ahora los victorenses, sufrieron el embate del gobierno del cambio; muchos burócratas fueron despedidos, la sobrepoblación del gobierno era ya insostenible, y había posiciones y puesto duplicados.

Pero ha llegado el momento de la verdad, la detención de Tomás Yarrington, y ahora la de Eugenio Hernández, deja endebles a muchos servidores públicos de primer y segundo nivel, que hicieron fama y fortuna en estas administraciones.

Ahora los altos funcionarios, se levantan temprano ven el periódico y si no aparecen en la lista, respiran profundo y vuelven al sorbo e café, cada día que pasa, salen más nombre y figuras, la lista es larga, todos con un solo común denominador, todos hicieron negocios al amparo del poder, y de su buena suerte y fortuna fueron responsables los ex gobernadores.

Ahora está la época de cuentos y espantos, muchos de los beneficiarios ven pasar las noticias de Eugenio y Tomás y hasta apagan el televisor, el miedo cunde en la ex burocracia privilegiada. Esa misma que en muchas de sus juergas en el campestre, presumía que, después de un sexenio, ya no tendrían necesidad de trabajar, no ellos, ni su descendencia. Así de ese tamaño, eran los negocios.

Cada administración estatal o municipal de los ciudades más grandes de Tamaulipas, se incorporaban a la clase pudiente nuevas familias, no muchas 7 o 10 para ser exactos, están eran las privilegiadas, las que contaban con la gracia del gobernante.

Los tiempos han cambiado, ahora todo esa clase política de privilegio, duerme y trasnocha más allá de la garita “La Quineña” los negocios en el Valle de Texas prosperaron y ahora lucen como todos unos empresarios, sería bueno que darle una revisada a esa zona, que durante la última década, vio como inversionistas tamaulipecos al amparo del poder, realizaron sus buenos negocios.

Pero todo se paga, en el 2018, veremos y diremos. Al tiempo.

De Aquello y lo demás...

Se levanta el telón, nuevamente Matamoros se viste de gala, el alcalde Chuchin De la Garza, tendrá a bien inaugurar la edición número 25 del Festival Internacional de Otoño, en la Atenas de Tamaulipas, como se le conoció antaño a nuestra ciudad.

25 años de cultura y arte por las calles, plazas y centros de reunión de Matamoros, para esta ocasión el presidente De la Garza, ha dispuesto los escenarios municipales y educativos, para que ningún matamorense que desee el acceso al arte y la cultura se quede con las ganas de disfrutar lo más selecto de las bellas artes.

Decir 25 años me llenan de nostalgia, un servidor durante 8 años puso su granito de arena en allá por el lejano 1993, cuando este movimiento cultural inicio en la ciudad; han pasado ya dos décadas y media, y con gusto aplaudo, que siga en pie la impresión más grande de cultura en Tamaulipas, orgullosamente matamorense. Tercera llamada.

chanorangel@live.com.mx  

Feliciano (Chano) Rangel Montoya

Periodista. Licenciado en Ciencias de la Comunicación por la Universidad de Matamoros. Productor General y Creador del Programa de Radio “La noticia Tal y como es”, conducido por Fructuoso Sáenz.

Actualmente es director general de Alfa Producción Digital, gerente de Creatividad, Marketing y Ventas de Publicidad y Mas, fue coordinador de Comunicación del  Diputado Local por el Distrito XVIII
Ingeniero Alfonso Sánchez Garza.

Ha sido coordinador de medios electrónicos en campañas políticas y de la Universidad Tecnológica de Matamoros, entre otros cargos.