Con la participación de especialistas pertenecientes a distintas facultades y unidades académicas, la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) realizó recientemente el II Foro sobre Derechos Humanos y Familia en el marco del Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas.

Luego de que la encargada de la dirección de la Unidad Académica de Trabajo Social y Ciencias para el Desarrollo Humano (UATSCDH), Blanca Guadalupe Cid de León Bujanos, con la representación de las autoridades universitarias, inaugurara el encuentro, la socióloga Karla Lorena Andrade Rubio, a nombre del Cuerpo Académico de Migración y Derechos Humanos, dirigió un mensaje a profesores y estudiantes acerca de la trascendencia de la fecha.

El foro desarrollado con formato de conferencias magistrales se celebró una mañana de miércoles, en el auditorio de la UATSCDH del campus Victoria y contó con la presencia de decenas de alumnos de las licenciaturas de Trabajo Social y Psicología acompañados de sus profesores.

La primera conferencia estuvo a cargo del maestro Sergio Cervantes Chiquito, catedrático de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales (FDCS), posgraduado en la Universidad Complutense de Madrid (España) y con estudios de especialización en Inglaterra, quien disertó acerca de la tortura a la que son sometidas las víctimas de desapariciones forzadas en el mundo.

Expuso varios casos ocurridos en México acentuando que muchas de las víctimas son mujeres, aunque en el pasado (en los años sesenta del siglo pasado) se practicó tortura de manera relevante contra disidentes políticos en el período llamado de la guerra sucia, cuando las fuerzas del orden perseguían a opositores que habían tomado las armas para tratar de cambiar al régimen de gobierno.

Aparte del conferencista mencionado, formaron parte del programa del foro los doctores Luisa Álvarez Cervantes y Guillermo Flores Miller, investigadores y docentes de la Unidad Académica Multidisciplinaria de Ciencias, Educación y Humanidades (UAMCEH), además de otros especialistas en el tema.

Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la desaparición forzada se usa como estrategia para infundir el terror en los ciudadanos; la sensación de inseguridad que esa práctica genera no se limita a los parientes próximos del desaparecido, sino que afecta a su comunidad y al conjunto de la sociedad.

La desaparición forzada se ha convertido en un problema mundial que no afecta únicamente a una región concreta del mundo; las desapariciones forzadas, que en su día fueron principalmente el producto de las dictaduras militares (especialmente en Sudamérica), pueden perpetrarse hoy día en situaciones complejas de conflicto interno, especialmente como método de represión política de los oponentes; es motivo de especial preocupación.

El acoso de los defensores de los derechos humanos, los parientes de las víctimas, los testigos y los abogados que se ocupan de los casos de desaparición forzada; el uso por los Estados de la lucha contra el terrorismo como excusa para el incumplimiento de sus obligaciones y la todavía generalizada impunidad por la práctica de la desaparición forzada demuestra que debe prestarse también especial atención a los grupos de personas especialmente vulnerables, como los niños y los discapacitados (se necesita especial atención para los migrantes).

El 21 de diciembre de 2010, la Asamblea General de la ONU, en virtud de la resolución A/RES/65/209, expresó su preocupación, en particular, por el aumento de las desapariciones forzadas o involuntarias en diversas regiones del mundo, como los arrestos, las detenciones y los secuestros cuando son parte de las desapariciones forzadas o equivalen a ellas, y por el creciente número de denuncias de actos de hostigamiento, maltrato e intimidación padecidos por testigos de desapariciones o familiares de personas que han desaparecido.

Asimismo, la resolución acoge con beneplácito la aprobación de la Convención Internacional para la protección de todas las personas contra las desapariciones forzadas y decide declarar el 30 de agosto Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas, que comenzó a observarse en 2011.

Profesores y alumnos que asistieron al foro en la UATSCDH coincidieron en expresar que estos encuentros académicos contribuyen a que las nuevas generaciones se formen en una cultura de tolerancia y respeto a los derechos humanos para que puedan contribuir en las transformaciones que el país necesita.

A propósito de la UAT, vale mencionar que uno de los cercanos colaboradores del próximo rector, José Andrés Suárez Fernández, es mi maestro Rogelio Castillo Walle; él pertenece a la UAM de Ciencias, Educación y Humanidades y es el actual director de Educación Media Superior en la máxima casa de estudios.

Correo: amlogtz@gmail.com

Ambrocio López Gutiérrez

Periodista y Sociólogo.
Columnista en diversos medios  electrónicos e impresos.
Redactor en el equipo de Prensa de la UAT.
Profesor de horario libre en la UAM de  Ciencias, Educación y Humanidades.