Oakland, EUA., (Notimex).- Es verdad que el basquetbol es un juego de conjunto y también que en cada equipo sobresale uno o más jugadores, y en las finales de la NBA que inician este jueves acaparan la atención dos por bando.

Stephen Curry y Kevin Durant son los líderes de los llamados Dubs; y LeBron James y Kyrie Irving por los azul y oro, y lógicamente van a encabezar los esfuerzos de sus demás compañeros.

Tan es así que la Asociación Nacional de Baloncesto (NBA) dio a conocer estadísticas precisas de ellos, porque serán quienes definan en gran parte la conquista del título.

Después de haber dado la bienvenida a Kevin Durant, incluso dejándole la gran iniciativa ofensiva de Golden State, Stephen Curry volvió a asumir su rol de protagonista en la parte final de la campaña regular y durante los juegos de playoffs.

Stephen llega a las finales 2017 con una efectividad en tiros de tres puntos del 41, en disparos de media distancia de 47 y debajo del tablero de 59, su frecuencia por izquierda es del 54 por ciento y por derecha del 46, y sus canastas son del 55 por ciento por lado izquierdo y del 47 por el derecho.

Kevin Durant cuenta con el 38 por ciento de efectividad en tiros de tres puntos, del 51 de media distancia y del 70 debajo del tablero, su frecuencia por lado izquierdo es del 45 por ciento y del derecho de 55, y en tiros de campo es del 49 por ciento por el izquierdo y 50 por el derecho.

Las estadísticas de LeBron James también son geniales, con un 37 por ciento en tiros de tres puntos, 37 de media distancia y 71 debajo del tablero, su frecuencia por izquierda es del 69 y por derecha del 31, y los tiros de campo son del 52 por ciento por izquierda y 45 por derecha.

Kyrie Irving llega con 39 por ciento en disparos de tres puntos, 47 de media distancia y 54 debajo del aro, una frecuencia del 35 por lado izquierdo y del 65 por derecha, y tiros de campo del 40 por sector zurdo y 52 por el diestro.

Así se moverán en la duela los mencionados a partir de la noche de este jueves, para definir la supremacía, porque en el 2015 se impuso Warriors, sin Kevin Durant, y en el 2016 lo hizo Cavaliers.