Matamoros, Tamaulipas.- El obispo de la Diócesis de Matamoros, Eugenio Andrés Lira Rugarcía, celebró aquí sus primeros 26 años de sacerdocio, tiempo en el que le han sucedido “cosas muy interesantes y maravillosas”.

Dijo sentirse complacido por hacer esta celebración en Matamoros, ciudad que lo ha recibido de una manera formidable y en donde aseguró sentirse muy a gusto, además agradeció a todas las personas que han pasado por su vida.

Explicó que a lo largo de estos 26 años ha atravesado también por una serie de vicisitudes, momentos muy agradables, pero también de dificultades, pero en donde ha confirmado que Dios es nuestro pastor y que poco a poco nos va conduciendo y actúa a través de tanta gente buena.

“En Matamoros estoy contento y lo que le sigue”, mencionó Lira Rugarcía en un mensaje a comunidad matamorense, luego de oficiar una misa en la Iglesia de Nuestra Señora del Refugio.

Estableció Eugenio Andrés Lira Rugarcía, que los momentos difíciles por los que atraviesan los mexicanos son una oportunidad para demostrar que se puede vivir como quieran, por lo que es indispensable ser lo mejor que podamos.

El obispo de la Diócesis de Matamoros dio gracias a Dios porque los sacerdotes son la presencia del amor de Dios y gracias a él, es que en esta Diócesis hay muy buenos sacerdotes.

Reiteró además que a lo largo de estos 26 años de sacerdocio ha tenido diferentes servicios, ya que ha sido profesor y director espiritual en el Seminario por muchos años, atendiendo parroquias y también vocero de la Diócesis del Estado de Puebla, entre algunos otros.