Incertidumbre, nerviosismo y tronar de dedos es lo que se ve a escasos 4 días de que inicie la nueva administración municipal, cuya duración será de 2 años.

JUAN FRANCISCO LEAL GUERRA, el presidente municipal electo de El Mante, encara el reto de gobernar durante todo ese tiempo lo más correcto y efectivo posible.

Y de allegar en ese tiempo récord apoyos, progreso, economía y desarrollo social y urbanístico a los mantenses.

Algunos de sus colaboradores más allegados confían en el temple del ex gerente del Ingenio Mante Juan Francisco Leal Guerra, para conducir de modo exitoso las riendas del municipio.

"Se trata de hacer mucho en poco tiempo; es un gran reto pero creemos que el ingeniero Juan Francisco tiene capacidad para eso y más", declaró una fuente informativa al preguntársele del tema.

Su fama de buen administrador, de hombre disciplinado, de político en ciernes, sigue creándole cierto halo de misticismo, de tal forma que su personalidad -conforme avanzan los días- sigue siendo un enigma.

Y las dudas acerca de él aún persisten.

Quizá no es para menos, si se toma en cuenta que Juan Francisco Leal Guerra no es político, y que nunca pisó su escabroso y complejo mundo lleno de campos minados y traiciones; pero sí en cambio se trata de un brillante y disciplinado administrador, cuya carrera la hizo en una factoría local, el Ingenio del Mante para ser preciso.

Ciertamente el alcalde electo no tiene pasado político, de no ser por su largo paso por la gerencia general del Ingenio azucarero del Mante y de Xicoténcatl, desde donde hizo carrera profesional y donde por fin, luego de una extensa trayectoria, acabó jubilándose y pensionándose.

Una vez llegada su cesantía, comenzó a gozar del fruto de sus más de 30 años de labor.

Juan Francisco Leal Guerra en realidad es un hombre cuya edad no rebasa los 65 años, y que a decir de algunos de sus cercanos amigos, goza de la fama de ser ordenado, disciplinado, puntual y generoso.

“No es un hombre pichicato cuando de reconocer capacidades se trata”, declaró una fuente entrevistada.

“Le gusta exigir pero también cumplir, le gusta que las cosas se hagan bien”, agrega.

Pasemos a otro tema.

Alejandro Guevara Cobos es un tornado, a donde quiera que va despierta controversia.

Se le da generar dinámicas de movimiento y acción a donde quiera que va, casi inevitablemente.

Dinámicas que por su temperamento despierta pasiones, constantes anécdotas y hasta peleas.

En pasado reciente, el día del último informe de gobierno de Egidio Torre Cantu, Alejandro Guevara, a la sazón probable líder estatal del PRI de Tamaulipas, tuvo un desencuentro con el alcalde electo de Nuevo Morelos, Tony Rivera, uno de los pocos priístas que ganaron su municipio en la elección del 5 de junio.

Tony Rivera, acompañado de su esposa la alcaldesa Marisela Nájera de Rivera, vio al diputado federal y fue a saludarlo.

-Alejandro, ¿Cómo estás?

Alejandro rechaza el saludo y lo deja con la mano extendida.

Tony Rivera se queda estupefacto, aunque únicamente acierta a preguntar, ¿qué pasa, porque tu enojo?

Alejandro le espeta en su cara cosas y versiones que Tony había venido diciendo –a quien quisiera escucharlo, en realidad- en su campaña, donde aseguraba que Alejandro no lo ayudo a ganar Nuevo Morelos, y que nunca se apersonó para reforzar su campaña.

'Alejandro no me ayuda. He tenido que ganar la elección yo solo' se ufanaba en decir el presidente municipal electo, Tony Rivera, cuya esposa le cederá el mando este 1 de octubre.

Tony Rivera y Marisela Nájera es en realidad un matrimonio que ha gobernado Nuevo Morelos casi consecutivamente.

Primero TONY RIVERA fue alcalde hace algunos ayeres; luego –hace 3 años- el PRI lo recuperó con MARISELA NÁJERA como candidata, después que el PAN lo gobernó durante 6 años consecutivos y fue hegemónico e intocable en esa ínsula.

Y esta vez Tony Rivera se volvió a lanzar como candidato del PRI, con tan buena suerte que ganó la elección con apenas unos 10 o 15 votos de diferencia, casi nada.

Pero volvamos a la escena entre uno y otro, entre Alejandro Guevara y Tony Rivera.

Ante la confusión, y una vez que se 'pancearon' como gallos de pelea dispuestos a desplumarse, la esposa de Tony Rivera le dijo a su esposo, el alcalde entrante: “Vámonos”.

Un par de horas después Rivera le llamó vía telefónica al diputado federal y contesta uno de sus ayudantes cercanos.

Ya en línea, Tony Rivera pregunta: ¿Alejandro?

-Sí, dígame, ¿con quién quiere hablar?

-Con Alejandro.

Con celular en mano y activado el micrófono Tony alcanza a escuchar una lapidaria expresión de una tercera voz:

-'Quién es?

-Es Tony Rivera, dice ser el presidente electo de Nuevo Morelos.

-Dile que no estoy, que no me esté chingando…

Es mejor que abordemos otro tema.

Alejandro Guevara Cobos se ufana, y con justa razón, de haber enviado tres batallones del ejército mexicano a Tamaulipas, justo cuando la guerra del narcotráfico festinaba muertes y desaparecidos a diario.

Fue en la época álgida del sexenato de Felipe Calderón, allá por 2010, cuando la sociedad tamaulipeca clamaba a gritos la llegada de militares.

Diariamente había bajas, muertes violentas, pero aunque solo se dieran en el mundillo delincuencial, éstas azoraban y llenaban de terror y pánico a la sociedad pacífica.

En la acertada entrevista hecha por Hoy Tamaulipas cuyo editor y dueño es Marco Esquivel, Alejandro Guevara Cobos recordó aquélla época.

Y no mintió. La realidad es que él jugó un papel fundamental para el envío de los tres batallones, quienes paliaron en gran medida la inseguridad.

Entonces, en aquel sexenio calderonista, Alejandro Guevara Cobos era diputado federal del sexto distrito, cuya cabecera es El Mante.

Asertivo, creemos que Alejandro Guevara Cobos hace bien en cacaraquear el huevo apelando a la historia, de la que él fue parte.

Máxime porque en Tamaulipas existe una mafia de políticos priistas que pudiendo hacer algo para paliar el suceso, no movieron nunca un dedo…

A otro tema.

ISRAEL RESENDIZ, de profesión licenciado en derecho, aunque con una carrera de periodismo estudiada en forma paralela, será el nuevo Jefe de prensa del gobierno municipal de Juan Francisco Leal Guerra; y para eso prepara y afina los detalles para una vez llegada su hora, a partir del 1 de octubre, comenzar a laborar al cien por ciento.

Su cercano colaborador con quien hará mancuerna es OSCAR OBREGÓN, también profesionista, ambos periodistas reconocidos por su seriedad, profesionalismo y capacidad periodística.

Los dos conocen  los vericuetos y secretos de esta dura y difícil carrera profesional, pues la ejercen desde hace varios lustros.

Creemos que por esfuerzo no quedará pues si una fama rodea tanto a ISRAEL RESENDIZ como a OSCAR OBREGÓN es la capacidad de trabajar de ambos.

Israel Resendiz acaba de presentar su renuncia a ORT, misma que le fue aceptada, y donde evidentemente dejó puertas abiertas, amén de un excelente palmaré de labor encomendada cumplida y de un buen comportamiento profesional. Todo eso habla bien de él.

Ahora bien, en la vida como en el plano profesional, se necesita de carácter firme, además de darse a respetar con hechos. Es así como la honestidad, carácter y el trabajo hablan por uno.

Y si algo tiene Israel Resendiz es carácter y hábito de saber trabajar incansablemente.

Así que no es de extrañar que triunfe en su nueva encomienda.

Otra de las cualidades de ambos es la lealtad. En este caso lealtad al proyecto del presidente municipal electo.

El periodista cuenta con el total apoyo del alcalde Juan Francisco Leal Guerra, quien se lo ha confirmado.

Bien, por ahora es todo, nos vemos pronto.

Marco Antonio Torres de León

Estudió la carrera de Ciencias de la Comunicación en CUTM, laboró en diarios como El Sol de San Luis. Inició en el diario La Opinión de Matamoros como reportero de deportes. Posteriormente trabajó como reportero de información general en Expreso de Mante en 1999, en Noticias del Sur (hoy Cinco Noticias, El Signo de Mante, El Matutino)