ENRIQUE OCHOA REZA, Presidente Nacional del PRI, dijo el 21 de septiembre que en menos de 30 días regresaría a tierras cuerudas y que lo haría para poner manos a la obra en la reconstrucción del tricolor en Tamaulipas.

Hoy se sabe que será el 17 de Octubre cuando llegue la convocatoria que marcará los requisitos que deberá cumplir quien aspire a dirigir los destinos de los priistas en el Estado, se dice que el documento ya tiene nombre y apellido marcado.

Desde el centro del país nos aseguran que las iniciales que traerá impresa la convocatoria son ALEJANDRO GUEVARA COBOS.

Suena lógico toda vez que el tres veces Diputado federal, oriundo de Ciudad Mante, es amigo personal de ENRIQUE OCHOA REZA, es amigo del Presidente Enrique Peña Nieto y tiene respaldo de la milicia y solo este último punto le coloca varios pasos delante de otros aspirantes.

Si la convocatoria sale el día 17 de octubre y OCHOA REZA regresa a Tamaulipas en 30 días, como lo prometió, es obvio que viene a tomar protesta al nuevo dirigente estatal del PRI ya que después de emitido el documento los tricolores tendrán tres días para organizarse, cumplir lo protocolos y manifestarse a favor de la fórmula que encabezara los trabajos de reconstrucción de ese instituto político.

Claro que ahora será más difícil para la organización, no contaran con el recurso estatal y para aquellos días ni para el acarreo, digo, la facilitación del traslado de las estructuras tricolores de toda la Entidad a la capital tamaulipeca costará a los propios priístas y será la primera prueba de fuego para quien los dirigirá.

Solo Tampico, Matamoros y Victoria estarán en condiciones de apoyar medianamente tal eventualidad, aunque lo harán con sus reservas y limitaciones, acabados de arribar al poder municipal difícil será que tengan la solvencia económica para echar toda la carne al asador como sucedía en otros tiempos y menos cuando todavía no conocerán la forma de trabajar y vigilar el recurso de la siguiente administración estatal.

Así es que el evento para la toma de protesta del nuevo dirigente estatal del tricolor quizá no sea tan ostentoso como en el pasado, a falta de recurso económico y de estructura los priistas tendrán que recurrir al ingenio para no verse minimizados.

No solo eso, los tricolores tendrán que contar con la capacidad de convencer que quieren cambiar y para ello requieren sangre joven, mujeres valiosas y viejos priístas que todavía cuenten con solvencia moral para presentarse en las urnas o por lo menos para respaldar a una dirigencia.

Los hay, claro que hay tricolores con esas características solo que primero se les tendrá que sacar del fango, es decir, se tendrá que comenzar con denunciar la corrupción y todos los delitos en los que incurrieron las autoridades locales que se van, sobre todo los presidentes municipales e incluso algunos candidatos que se vieron derrotados.

Cierto, también el PRI tendrá que demostrar que la cúpula es raza, puede andar en territorio, caminar las polvorientas calles, pedir un voto y aguantar cuando les digan sus desaciertos, les reclamen la situación que hoy padecemos.

El 17 de octubre conoceremos el nombre de quien será el nuevo dirigente del PRI, será a partir de esa fecha cuando se sepa si se publica la esquela del tricolor, si nada más buscaron al enterrador, o si en realidad aprendieron y quieren ganar la mayoría de los votos de los tamaulipecos, con el puro nombre de su dirigente estatal y los del equipo que le acompañe sabremos para que los llamaron y si van en serio o nomás a saquear lo último que queda de lo que alguna vez fue un poderoso partido.

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Rosa Elena González

Es Licenciada en Relaciones Públicas. Ha colaborado con editoriales en El Mercurio.
Actualmente su columna Vida Diaria se publica en el Portal HOYTamaulipas y los periódicos La Verdad de Tamaulipas, Expreso, La Extra, La Voz de Tula, El Tiempo de Mante y Astronoticias, El Bravo de Matamoros y Canal 10