Uno de los principales factores que ha permitido al PAN en Matamoros arrebatarle posiciones políticas al PRI, es sin duda las decepciones de los gobiernos priistas, claro con sus matices y excepciones. Pero es imposible soslayar el papel que el PAN en Matamoros ha venido desempeñando en su historia como oposición política; callar y solapar los abusos del poder.
En la historia reciente de Matamoros, Leticia Salazar en su campaña municipal del 2013 contrató encuestadoras, diseñadores de imagen, consultores políticos, hackers, etc. con un claro objetivo, convertirse en la primer mujer en gobernar Matamoros. Leticia de la noche a la mañana se había convertido "estratégicamente" en una dura opositora del PRI, decidiendo que era el momento de romper los convenios del silencio que guardaba con el poder.
Leticia Salazar estableció en el imaginario colectivo que el gran culpable de todos los males de la ciudad era el PRI, pero lo que nunca explicó fue ¿por qué el PAN y Leticia Salazar siendo oposición, permitieron, callaron y solaparon los abusos del poder?  
Por otra parte, el próximo gobierno municipal priista en Matamoros, durará 2 años y gracias a la reciente reforma electoral, Chuchín de la Garza tendrá la oportunidad de buscar la reelección para un segundo periodo. Sin embargo, tendrá que tomar una difícil decisión; ceder a las presiones políticas para dejarle el camino libre a Carlos García González en el 2018 o mantenerse firme con el proyecto del partido que lo llevó al poder.
Para esto, el Presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRI Enrique Ochoa Reza, ha propuesto una nueva relación con los funcionarios, legisladores, gobernadores o presidentes municipales emanados del tricolor; que sea el partido más autocrítico,  que sea el partido quién llame a cuentas a aquellos que, con su comportamiento o desempeño público, ensucien la imagen del partido o traicionen los postulados del PRI en cualquiera de sus formas. Parafraseando a Martin Luther King "siempre es buen momento para hacer lo correcto". 
Los retos que el gobierno de alternancia en Tamaulipas del PAN y del PRI en Matamoros tienen enfrente, son los mismos y trillados gritos de una sociedad harta de la clase política de siempre; cero tolerancia a la impunidad, a la corrupción y a la opacidad de los gobiernos. Y es claro que Tamaulipas necesita verdaderos contrapesos del poder y para esto se debe evitar caer nuevamente en uno de los más graves errores que dañan a nuestra democracia: tener una oposición, sumisa, cómplice y vendida, los resultados están a la vista. 

Efraín Hernández

Originario de Matamoros Tamaulipas, ha participado en diferentes procesos electorales desde hace 15 años.
Se ha especializado en análisis y comunicación política, asesoría de campañas electorales.
Master en Asesoramiento de Imagen y Consultoría Política por la Universidad Camilo José Cela.
Ha ocupado diferentes cargos en el gobierno municipal y estatal.