El decálogo por la paz y el bien de Tamaulipas, fue como nombraron el pronunciamiento de Baltazar Hinojosa, candidato de la coalición PRI-PVEM-PANAL desde Tampico, pero lo que más eco encontró fue el punto donde se compromete a no tener un gobierno encubridor, donde incluyó la frase “Yo no soy Tomás, ni Eugenio, Ni Egidio, y mucho menos soy, ni seré Francisco García Cabeza de vaca” mensaje que fue ovacionado por los asistentes. Después de ello se desataron los análisis, chismorreo y cuestionamientos.
Muchos lo calificaron de tardado, y sí, posiblemente se esperó demasiado para algo que tenía que hacer desde que inició la campaña, sorprende que a su equipo de sabiondos todavía no les quedará claro el desgaste que arrastran las siglas del PRI y la mala imagen de los ex gobernadores, casi imagino que la respuesta es que estaban esperando el tiempo correcto y yo diría, que estaban rogando que no fuera necesario, pero tuvieron que desmarcarse cuando saben que sus adversarios azules pegarán más fuerte en esos puntos para el cierre de campaña.
¿Qué si fue porque no van tan bien los números como quisieran? pues aunque fueran bien o mal en las mediciones, era un tema que muchos veían necesario como parte de la estrategia para ganar confianza. ¿Qué si le ayudará para captar más puntos en el electorado? no lo dudamos, quien sabe si sea lo esperado para despegarse lo suficiente de su adversario.
¿Qué si fue deslinde? el primero que defendió ese punto fue Emilio Gamboa Patrón, Coordinador de la bancada del PRI en el Senado, insistió en que Baltazar Hinojosa solo aclaró quien es el candidato y lo hace dentro de una sincronización de campaña. Y en cuanto a las preguntas sobre Tomás Yarrington, fue puntual en mencionar que el exgobernador debe dar la cara.
¿Qué tanto le suma o le resta? Pues en Tamaulipas es histórico un mensaje como el pronunciado por un candidato priista a la gubernatura, ya veremos el comportamiento del electorado, se ha dado en otros estados y a nivel nacional en otros tiempos, algunos han funcionado, otros han sido poco fructíferos e incluso han terminado en tragedia.
¿Qué si lo va cumplir? ¿Qué si le creemos? A ver, todavía son tiempos de campaña, estamos en medio de una guerra por el poder, así que todo es parte de una estrategia y de seguro su equipo de sabiondos evaluó muy bien el tema. ¿Estuvieron de acuerdo los ex gobernadores y el actual, de ser mencionados? Buena pregunta.
El Chivatazo: Dicen que Leticia Gerardo Hernández, Candidata del PAN y dirigente de la Sección 10 de sindicato del IMSS en Tamaulipas, junto su esposo el también panista Pedro Luis Ramírez, tienen bajo amenaza a los sindicalizados para que los apoyen en la serie de protestas que están organizando, incluso tomar la institución médica pero más como acto político que en busca de mejoras para sus trabajadores. No le digo, Puras Charadas.
