Conocí a Cristopher James Barousse. Gracias Mayra Benavides tuve la oportunidad de conversar, de escuchar, de viva voz la postura, las ideas y los escenarios que hoy en día se viven en la política nacional y, claro, la estatal. Por su nombre y apellidos ni parece mexicano, pero es el actual líder de la Red de Jóvenes x México.
Efectivamente, sorprende su nombre. Es originario de Chihuahua y sorprende su afirmación: que es parte de una generación que nació, creció y se desarrollo en la oposición. Y cuenta la historia, tanto a nivel de su estado natal como se vivió en los doce años del gobierno panista a nivel nacional. Quizá por eso, se muestra, como un joven optimista y, eso si, muy comprometido con su partido, el PRI.
James da la impresión de conocer muy bien a Tamaulipas. Vino a apuntalar a Mayra Benavides y a dar un curso de capacitación política, ahí donde Naye Gómez hace talacha partidista, con todo y que a veces se le olvida uno que otro compromiso. El caso es que James, afirma, en la capacitación les dejo un mensaje pragmático a los jóvenes: háganse útiles, prepárense.
Con voz emocionada, pretendiendo ser persuasiva, explica el papel de los jóvenes. ¿Ser un mito la participación de los jóvenes en la política? Y es que, unos y otros, entre expertos, politólogos y uno que otro estudio, tiene esa afirmación: que el joven, que es mayoritario en el padrón electoral, no participa, no vota, cuando por su porcentaje en el padrón lo convierte en un poderoso votante, puede decidir una elección. Hay 36 millones de jóvenes en el país.
El problema de la participación de los jóvenes puede verse en dos dimensiones: en una percepción y en como se ve, se sienten, ahí en la talacha partidista. En este sentido Mayra apuntala que ella es testigo de una intensa participación juvenil que, afirma, no se ve, no se observa en los otros partidos políticos. La cuestión es de percepción: buena parte estamos convencidos de que no participan, con todo y que veamos a jóvenes preparándose, por decir, en el ICADEP municipal, ahí donde Horacio Reyna presume y presume a sus alumnos.
Tiene sentido el consejo de James a los jóvenes tamaulipecos: ¡háganse útiles! Es parte de una praxis política; quien está preparado, quien conoce y adquiere experiencia, tarde o temprano, sin la menor duda, va a estar en el escaparte de las decisiones políticas. Necesita, eso sí, trabajar y mostrar conocimientos, capacidad, habilidades. ¡Ser útil!, convertirse en un experto o en alguien que, dada su talento, capacidad y experiencia, está destinado a ser llamado a responsabilidades de índole política.
Así como vi, como escuche, a James es como uno quisiera escuchar a buena parte de la juventud. Comprometidos con un proyecto, sabiendo perfectamente que es lo que quieren y, sobre todo, lo que tienen que hacer para lograrlo. Y es que, por mi trabajo cotidiano, estoy en contacto con jóvenes universitarios y, la verdad, son pocos, muy pocos, los que se emocionan con la participación política, con la actividad cívica.
Hablando de jóvenes universitarios es justo mencionar que Leopoldo Salazar este jueves recibirá de manos del rector un justo reconocimiento: el premio a la tesis de calidad a nivel de licenciatura. Es egresado de la carrera de Ciencias de la Comunicación, fue excelente estudiante y que creen, CONACYT no le aprobó su beca para ir a estudiar una maestría el extranjero… y luego si, se quejan, de la falta de talentos. En fin, va para Polo, mi felicitación deseándole que pronto, si, pronto, la burocracia de CONACYT sea menos perversa.
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