Sin lugar a dudas, sabemos que a partir de esta fecha Tamaulipas será blanco de las encuestadoras, locales y nacionales, en aras de encontrar consenso de todos los institutos políticos para elegir a quienes contendrán en 2016 por la gubernatura, así como las alcaldías y diputaciones locales.
Ya apareció la primera y ofrece resultados poco normales para la gran mayoría de los tamaulipecos, y que ubican a Baltasar Hinojosa como puntero en las preferencias del Partido Revolucionario Institucional.
Hay muchos “tiradores”, como dicen algunos, pero la verdad es que este tipo de trabajo nos permite suponer que la misma encuesta se ha realizado en un universo poco citadino, poco común, y que se ha centrado en los habitantes tamaulipecos en el centro del país.
Sin embargo, para nadie es desconocido el hecho de que muchos de estos trabajos se llevan a cabo por encargo, es decir, en donde se ubica a los principales contendientes, inclusive de varios partidos políticos, pero se otorga un honroso primer lugar al firmante del cheque en cuestión.
Hay mucho qué comentar al respecto, y en ese tenor vemos en las mesas de café a gente que piensa que quien lleva la delantera es el abogado victorense Alejandro Etienne Llano, actual alcalde de nuestra muy querida ciudad, o el contador Miguel González Salum, quien como diputado federal y alcalde tuvo una actuación bastante destacada. También brillan en las encuestas el diputado Ramiro Ramos Salinas, actual presidente del Congreso, y otros más, muchos más, que quieren llegar a ocupar el máximo puesto de elección popular en Tamaulipas que hoy ostenta Egidio Torre Cantú.
En otros institutos políticos también hay una fuerte lucha por la nominación, y algunos recurren a las redes sociales.
El problema de las redes, a decir verdad, es que muchos de los comentarios son producidos por los mismos colaboradores de los pre candidatos, o como dicen en la calle y los cafés: “paleros” que hablan maravillas de sus amigos.
Otros, sin embargo, se dedican, a través de perfiles falsos con identidades ocultas, a difamar y hablar cosas que nada tienen que ver ni con la realidad ni con la honorabilidad que supone el escribir públicamente.
Las redes sociales son muy importantes, pero no se puede considerar que sean determinantes como para tomar una decisión. Hay inclusive, un tamaulipeco que ha pedido a la gente manifestarse para saber si se lanza o no: el resultado ha sido una serie de comentarios de sus amigos y de sus enemigos, que aseguran, se encuentra en la situación económica actual gracias a su capacidad negociadora como precandidato y candidato de oposición.
Hay mucho, pero mucho que escribir y hablar. Pero la gente es la que tiene la verdad, y si los encuestadores se equivocan y deciden dar rienda suelta a las preferencias de sus clientes, puede suceder que el día de la elección haya un resultado muy distinto a la realidad que todos suponen existe.
Y si eso sucede, lo natural es que el día de la elección el resultado sea distingo, de ahí la importancia que tiene el buscar una encuestadora serie y honorable, que nos diga realmente “estás en tal o cual situación”, y a partir de ahí, ya se podrá establecer una estrategia para ganar, en primera instancia, la nominación, y luego, la gubernatura.
De otra forma, es soñar con utopías y cosas que nada tienen que ver con al voluntad popular, y hay que recordar que cada día que pasa es más difícil la manipulación de ésta, la voluntad popular, porque la gente tiene mayor acceso a la información, y eso nos hace ser un poco más críticos, más analíticos, y por ende, más selectivos.
El hándicap es interesante, así que hay que aprovechar cada momento para posicionarse. Hay de todo, hasta golpes bajos, y en eso, algunos tienen muchas “tablas”.
La batalla electoral se encuentra en uno de sus puntos más interesantes, pues.
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