No se puede concebir una nación en vías de desarrollo con expectativas de ingresar a un desarrollo extraordinario si no somos capaces de observar nuestros reglamentos.
México se ha caracterizado por ser un país donde la ley es cosa muerta, y donde todo mundo abusa de las ya existentes para lucrar con dolo. Un claro ejemplo lo vemos cuando en instituciones oficiales hay cambios de administración, y los anteriores funcionarios son regresados a sus puestos originales y DEMANDAN! pidiendo les devuelvan o les indemnicen porque ya no cobrarán lo de antes.
Muchos de éstos están coludidos en actos deshonestos que dejan a las instituciones, oficiales y educativas, temblando de la cantidad extraordinaria que se robaron y malversaron. No entendemos por qué las autoridades no actúan enérgicamente y les despojan de un trabajo que no han sabido defender con honestidad y profesionalismo, y por qué no les consignan para que paguen por todo lo que se robaron.
Los llaman, les dicen “niño malo” y ya. Y quien nunca roba, enojado espera una oportunidad de levantar vuelo pero no las hay, porque esos ladrones están siempre ahí.
Y también lo vemos, por ejemplo, en los casos en que los manifestantes de la CNTE delinquen y no son castigados.
Otro caso que da pena es el que se suscitó en el partido Atlas-Guadalajara, donde la autoridad “únicamente” detuvo a 7 rijosos y la Federación de Fútbol castigó con veto de dos partidos al estadio Jalisco. Pasó el tiempo y el club Atlas anunció que retirará los cargos contra esos 7 delincuentes para que salgan libres, y la FMF solamente les dejó un castigo de un partido, es decir, les perdonó el otro.
Primero, detienen, luego consigna, castigan y perdonan. Así no funciona el asunto, suponemos.
Vemos con tristeza el caso de la peruana Laura Bozo, quien se autonombra “periodista” y conductora, cuando no es ni lo uno ni lo otro, sino una mercenaria de la información, comerciante del dolor ajeno y delincuente de la información, quien viola todo ordenamiento que tiene la Ley Federal de Radio, Televisión y Cinematografía, al igual que su empresa Televisa.
No pasa nada: la mujer ahora ha vociferado contra los políticos mexicanos, contra el sistema y se autonombra paladín del pueblo de México. En los casos que le corresponden, aplicaría que se le hiciera un procedimiento para extraditarla, el famoso artículo 33, y que se vaya por donde vino.
¿Por qué no se hace? Es lo que nos preguntamos todos los mexicanos que nos levantamos a diario y pagamos nuestros impuestos, que queremos un México mejor para nuestros hijos y nos lastima, nos ofende ver a senadores y diputados que cobran los miles de pesos sin devengarlos, sujetos a dietas y compensaciones sin justificación ni pago de impuestos.
Cuando los funcionarios de todo nivel cobran hasta por reír, comisiones y el famoso diezmo, y ofende cuando damos una clase extraordinaria y del salario acordado nos quitan el impuesto correspondiente: hoy ganamos menos por pagar impuestos.
Esperamos que la señora Laura Bozo sea expulsada del país, que los miembros de la CNTE sean enjuiciados por todo lo que robaron por años así como quienes les autorizaron tales barbaridades, esperamos que nuestros funcionarios se apeguen a un salario justo y dejen de substraer dinero ilegal, esperamos que se castigue a quienes han saqueado a las instituciones educativas y siguen en la nómina con el cinismo de demandarlos aún para sacar de más.
Esperamos, en un utópico momento, que la justicia se imponga, y entonces, que nuestros hijos se puedan sentir orgullosos de vivir en una nación donde la ley es cosa de todos los días.
Esperamos cumplimiento, nada más. Claro, sueños guajiros.
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