Llama mucho la atención cierta información que, habla de una privatización en los servicios de segundo nivel dentro del Instituto Mexicano del Seguro Social –IMSS-, y que tiene que ver directamente con lo que nos ofrecen a sus millones de derechohabientes.
Ya se especula sobre la idea de sacar del cuadro de atención a quienes vivimos con hipertensión y diabetes, las enfermedades más recurrentes del país y causantes de la mayor cantidad de muertes. Con una supuesta exclusión de estos padecimientos, estaremos condenados a ser un pueblo enfermo. Se habla de que se va a obligar a quienes tenemos estos padecimientos a contratar un seguro de gastos médicos mayores, lo que se antoja imposible e irreal, considerando que las compañías aseguradores son unos pulpos insaciables que no permitirán que paguemos una póliza a sabiendas que podremos caer en complicaciones que requieren hospitalización, diálisis, amputaciones, tratamientos láser y más, lo que implica un mundo de dinero para ellos. No son hermanas de la caridad: son unos verdaderos vampiros, pulpos, son las garrapatas del sistema económico mexicano.
Llegó a nuestro poder una lista de un Hospital General Regional que habla de atención en unidades de segundo nivel, sin embargo, hemos de comentar que la información es tendenciosa y, a pesar de provenir de una página oficial, quien la ha circulado en redes sociales no tiene idea de lo que se habla y aprovecha para confundir y sembrar más caos en una nación que padece de ingobernabilidad y crisis en todos sentidos.
Al respecto, hemos de informar que la presente se refiere al Acuerdo ACDO.SA2.HCT.010611/155P.DF, dictado por el H. Consejo Técnico del Instituto Mexicano del Seguro Social, en la sesión ordinaria del 1 de junio de 2011, y que se refiere a la aprobación de costos unitarios por el nivel de atención médica para el año de 2011.
En ese sentido, el acuerdo del Diario Oficial del 11 de febrero de 2015 establece el coste de servicios de atención médica, pero, hay que tener cuidado: son para personas no derechohabientes.
¿Qué quiere decir eso?
Que el IMSS atiende a su población como lo ha hecho hasta la fecha, y quien no tenga servicio de este tipo deberá pagar: no se negará el servicio, pero hay que pagarlo. NO ES CIERTO que se vaya a cobrar a los que tenemos el derecho a la salud garantizado a través del IMSS.
Somos de la idea de que la información que trascendió en redes sociales está tergiversada, es de mala intención y tiene objetivos poco nobles: todos menos informar objetivamente. Ese es el riesgo de las redes sociales: que cualquier imprudente, inconsciente o falto de inteligencia puede colar un rumor como tal y querer hacerlo verdad.
¡Vemos como está el país, con tantos problemas y situaciones que nos tienen como estamos, y todavía hacemos caso a estos sujetos que no tienen más ánimo que el de confundir!
Claro que tienen costo los servicios, porque alguien los paga, pero los que somos derechohabientes no tenemos esa obligatoriedad, porque no se ha decidido lo anterior. Lo que se escuche, al día de hoy, son rumores, chismes de lavadero y tendencias a confundir a un México noble que no espera mucho de sus sistemas oficiales, pero tampoco de los usuarios de redes sociales, ajenos a la veracidad y ética periodística, a la honestidad y ávidos de armar chismes y líos, tendientes todos éstos a desestabilizar una nación a costa de lo que sea.
No somos de la concepción de que los servicios médicos oficiales son de excelencia, pero estamos ciertos que se cumple con los preceptos básicos, y que los rumores nos hacen más daño que beneficio.
Fuera mentirosos de redes sociales, y confirmemos lo que se dice, publica y escribe, por favor. No cualquiera sabe hacerlo.
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