México, (Notimex).- Desde la primera nota del tema "Shalom" y con su angelical voz y magnetismo sobre el escenario, la cantante israelí Noa cautivó anoche al público que se dio cita en el Lunario del Auditorio Nacional.
Al filo de las 21:00 horas, en compañía de un guitarrista, Noa, ataviada con un elegante vestido de noche color negro con motivos dorados, arribó al entarimado en medio de sonadas ovaciones.
Para la interpretación de "Mishaela", el público la acompañó con palmadas que subieron de tono al finalizar el tema, al que le siguió "Happy song" con rítmicas percusiones.
Antes de hacer sonar "Pokeach", Noa sorprendió por su improvisación para agradecer al público su presencia y luego tocar los tambores al ritmo de la guitarra.
Tras disculparse por su pésimo español, la intérprete leyó un texto para compartir que el repertorio de la noche estaría compuesto por canciones originales en inglés, hebreo, menonita y español, y que algunas de ellas forman parte de su más reciente álbum "Love Medicine", que es fruto de la observación.
La cantautora y activista detalló que ese material surgió de encuentros con personas y situaciones únicas, y que la próxima canción, "Look at the moon", surgió a partir de una investigación que hizo sobre la vida de Juan Pablo II, "para quien tuve el placer de cantar muchas veces".
Luego de ser premiada con aplausos, Noa volvió a tomar su texto y expuso que la canción que continuaba la escribió tras conocer a Joaquín Sabina, quien la dejó encantada por su extraordinario talento y personalidad, y que al escucharla él decidió traducirla al español.
"Lamentablemente él no está aquí, pero sí su sombrero", bromeó para después interpretar el tema "You".
Al presentar la canción de "Caprichoso el azar", la cantante comentó que la escribió Joan Manuel Serrat, a quien considera uno de los mayores cantautores en español.
"Para mí es un verdadero honor y orgullo llamarlo amigo y esta canción la hemos cantado infinidad de ocasiones en escenarios de España", anotó ante los aplausos de las decenas de personas que gozaron de cada una de sus interpretaciones.
La canción titulada "Uri" fue interpretada antes de "Yuma", tema tradicional de Yemen que dedicó a “todas las mujeres que arriesgan su vida al luchar interminable por la libertad” y que fue uno de los más emotivos de la velada.
Con gran entusiasmo presentó a Gil Dor, quien la ha acompañado como su guitarrista durante los últimos de 25 años.
"Este hombre fue mi profesor en la escuela de música de Israel y aún sigue siendo mi maestro porque su sabiduría, talento y amistad han sido las luces que me han guiado como intérprete, compositora y ser humano”, expresó previo a acompañarlo con los tambores en su solo de guitarra.
Al tomar de nuevo el micrófono, expresó que las siguientes dos canciones: "Otra vez" y "Uno queriendo ser dos" fueron escritas originalmente en idioma inglés, pero luego fueron adaptadas al español por Raquel y Gloria Díaz. “Hace poco descubrí que su consejero secreto era Sabina”, apuntó.
Apoyada de la sonoridad de unos rítmicos chiflidos, Noa sorprendió a los presentes al interpretar "Child of man", tema que recreó un ambiente festivo que dio lugar a "Broker" y "Keren or".
Aunque parecía que la velada había concluido, el ambiente efusivo del público la ánimo a seguir con su actuación y mostrar sus dotes artísticos para interpretar una aria operística.
Sobre ella, dijo que reflexiona sobre cómo todo en la vida es una cuestión de perspectiva y que fue compuesta especialmente para un proyecto con la Sinfónica de Jerusalén, con base en dos canciones infantiles sobre gallos y gallinas.
Al finalizar el tema, el auditorio ovacionó a Noa, quien además de agradecer las muestras de cariño, obsequió una interpretación más.
Se trató de "La vida es bella", que fue coreada por el público, y dijo que “es el tema principal de la cinta que ganó un Oscar por la grandeza y simplicidad de su mensaje, el cual es que no hay maldad por grande que sea, que el amor y la luz del espíritu humano no puedan superar”.
Reconocida en el mundo por su incansable trabajo a favor de la paz, principalmente en Israel y Palestina, Noa explicó que tanto ella como Dor fueron los primeros judíos invitados por Juan Pablo II para actuar en El Vaticano.
Agregó que esa invitación se convirtió en un símbolo que rompió los muros entre religiones y el interminable esfuerzo por la paz, filosofía que al igual que el Papa, ellos persiguen.
Contenta por su próxima presentación en El Vaticano, esta vez a invitación expresa del Papa Francisco, Noa puso a cantar y aplaudir al público con “Shalom, Shalom”, tema que al finalizar hizo que el público se pusiera de pie.
Al unísono de ¡otra, otra!, la artista de origen israelí interpretó “Ave María”, no sin antes mencionar que se trataba de una oración por la paz, más allá de razas o religiones.
