Nuevo Laredo, Tamaulipas.- El Coordinador Regional de diputados locales panistas, Enrique Rivas Cuéllar, exhortó a sus pares de la LXII Legislatura en el Congreso de Tamaulipas a aprobar a la brevedad la Ley anticorrupción, para que entre en vigor en el menor tiempo posible y dar a los tamaulipecos mayor certeza de transparencia y rendición de cuentas.
El miércoles, el Senado de la República aprobó la reforma que crea el Sistema Nacional Anticorrupción y su respectiva ley, la que debe recibir el aval de la mitad más uno de los Congresos locales, para que las reformas a varios artículos de la Constitución se armonicen y quede lista para su publicación en el Diario Oficial de la Federación, y con esto, pueda entrar en vigor.
“Celebramos esta conquista de Acción Nacional y hacemos un llamado para que el resto de los diputados que integramos el Congreso, la LXII legislatura, podamos aprobar estar Ley a la brevedad posible... no dejarla como una intención más en nuestro quehacer legislativo”, dijo el diputado tamaulipeco.
Dijo que esta iniciativa cien por ciento panista por fortuna recibió el apoyo de otras fuerzas políticas y con esta Ley, podrán evitarse abusos y actos de corrupción de funcionarios del sector público.
“Vemos con beneplácito que otras fuerzas políticas la han hecho suya y poder evitar un sinnúmero de hechos tan lamentables que hoy se dan a conocer a nivel nacional… hechos en Tamaulipas, hechos de corrupción, que no tienen una explicación y que sean autoridades extranjeras, del vecino país, de aquí del Estado de Texas las que ventilen este tipo de irregularidades”, refirió Rivas Cuéllar.
Dijo es importante la aprobación de la Ley en el menor tiempo posible, para que de esta forma se empiecen a constituir los órganos fiscalizadores correspondientes, que le ofrezcan mayor transparencia y rendición de cuentas a los tamaulipecos.
Reiteró no es posible que algunos personajes terminen en la cárcel por sus errores políticos y no por sus desvíos administrativos.
Citó el caso de Elba Esther Gordillo, que es procesada no por su enriquecimiento ilícito, sino por haber desafiado a un sistema que en su momento la colocó en puestos de poder.
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