Ciudad Victoria, Tamaulipas.- Los derechos humanos son beneficios que todo individuo tiene por el hecho de ser persona y no se puede hablar de una verdadera democracia sin derechos humanos, señaló el Dr. Adalberto Abad Suárez Ávila durante la presentación en esta ciudad del libro “La Protección de los Derechos Fundamentales en la Novena Época de la Suprema Corte”.
Ante estudiantes de la Unidad Académica de Derecho y Ciencias Sociales, el especialista en derechos humanos mencionó que lo que lo motivó a realizar esta investigación que duró varios años, fue la poca relevancia que le daba la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) a los derechos humanos.
Explicó que la mayoría de los ciudadanos desconocen la función Suprema Corte por eso la importancia de este tema, en el cual contó con el apoyo de especialistas en la materia.
Indicó que entre los puntos en que se enfocó se destacan la facultad de atracción que tienen la Corte y la acción de inconstitucionalidad, decidiendo comenzar su investigación a partir de 1995 a partir de la nueva conformación de la SCJN.
Refirió que durante dos años se sumergió investigando, revisando cientos de expedientes de este órgano sobre este tema, “les puedo decir que la mejor herramienta que tenemos hoy en día los investigadores en derecho son los portales de transparencia”, precisó.
Recordó cómo mientras hacía la investigación se preparaba una reforma constitucional en derechos humanos, lo que le causó una gran satisfacción al ver la relevancia que se le estaba dando ya al tema y que se aprobó en el 2011.
Brevemente explicó que su investigación muestra en dos períodos a la SCJN, el primero de ellos de 1994 al 2005, donde la prioridad era resolver los conflictos entre actores políticos y la segunda de 2006 a 2011 cuando la Corte empieza a definir lo que es una violación grave a las garantías individuales o sea los derechos humanos.
En este segundo período dijo, la Suprema Corte aumentó la cantidad de asunto de esta índole, “estamos hablando de un trabajo incipiente, pero constante en materia de derechos humanos!”, precisó.
Señaló que básicamente la Corte no toma casos que involucraran los derechos humanos porque no los consideraba de su competencia, aunque legalmente si lo son, los cuales existen desde la Constitución de 1857.
Comentó que otro factor que influyó en ellos, fue que los ministros que integraban la primera sala que provenían del área penal del sistema judicial o de fuera de la función pública eran considerados progresistas y decidieron darle mayor relevancia a la corte que solo resolver conflictos de orden político-administrativo.
Fue así como estos ministros mandaron realizar varios estudios decidieron impulsar una reforma en la SCJN basándose en tener políticas públicas definidas en el tema, creando el Libro Blanco de la Reforma Judicial que trajo como consecuencia la reforma penal, de amparo y en derechos humanos.
Reiteró que dependerá mucho de los ministros de continuar haciendo políticas públicas en pro de los derechos humanos, ya que si no llegan ministros progresistas en lugar de la apertura que se desea se tenga, podría darse un retroceso en la materia.
Enfatizó en que la Suprema Corte de Justicia de la Nación no puede solo verse como 11 personas (ministros) que se sientan en una tarde a resolver conflictos y al día siguiente hacen lo mismo, sino como un grupo de especialistas que toman decisiones de acuerdo a un criterio y visión de la defensa de los derechos fundamentales como son los derechos humanos.
Durante la presentación se contó con la presencia del Dr. Edgar Danés y el Dr. Enrique Alfaro Dávila, catedrático y director de la Unidad Académica de Derecho y Ciencias Sociales, respectivamente.
vmp
