La telegenia es una asignatura que adquiere cada vez mayor importancia en la vasta ciencia del marketing político, y se puso en boga en países democráticos cuyos ciclos eleccionarios se volvieron recurrentes.
Amén de ofrecer buenas ideas, hallar candidatos con particular carisma es un asunto cada vez más importante para los partidos políticos; y tiene que ser evaluado antes que inicien las campañas electorales.
La telegenia es un tema serio, cuya importancia no puede ser omitida ni tampoco ignorada.
Mayormente si los partidos político quieren ganar votos con relativa facilidad.
Y no es que el marketing político trate de convertir a fuerza un campo de batalla electoral en una pasarela de belleza banal, hueca, superficial, sino que exige perfiles cuya imagen sea vendible, atractiva, atrayente y hasta subyugante.
Y una de esas materias es precisamente la telegenia, que tiene que ver con poseer un perfil atractivo, como ya dijimos.
Dos casos conocidos en México de políticos telegénicos son Enrique Peña Nieto y Eugenio Hernández Flores, éste último ex gobernador de Tamaulipas, un fenómeno en su tiempo.
Existen electores, particularmente mujeres, que dan primordial importancia a la agradable apariencia de sus candidatos y los prefieren por encima de otras virtudes, como la inteligencia, su capacidad de gestión o su oratoria.
Aunque parezca mentira, hay mujeres u hombres que ponen en primer lugar éstas aptitudes y capacidades, antes que la eficacia.
El caso de Enrique Peña Nieto es el más conocido.
Todo mundo conoce su proverbial estupidez, su supina ignorancia, generalmente es el “gallego” de todos los chistes tontos.
Pero contra lo que se diga, es el presidente de la República.
Aquí en el sexto distrito Alejandro Guevara Cobos por su parte, tiene un halo de telegenia que lo favorece a leguas. Y como elemento secundario, la pulcritud en su vestimenta forma parte de su imagen.
Además, se trata de un candidato que ha hecho de su trayectoria política todo un estilo, para algunos, sano y atrayente, para otros, no.
Empero al mantense su estilo le sigue dando estupendos resultados.
Y ahora daremos varios por qué.
Uno, Alejandro Guevara es uno de los pocos candidatos del PRI en Tamaulipas que más conoce del uso de redes sociales, Facebook, Twitter y demás, a las cuales le saca estupendo provecho; esto, para proyectarse de cara al pueblo y para difundir sus argumentos en el colectivo.
Su costumbre de subir imágenes corriendo en su caminadora, corriendo en la pista de tartán a temprana hora mientras se ve salir el sol, o bien dejando pensamientos positivos, es un factor determinante para que los electores lo valoren y lo tasen favorablemente.
El candidato telegénico esencialmente, hoy, tiene un vasto campo por recorrer. Y si lo usa de forma adecuada, alcanzará el éxito más fácilmente que los demás.
Hoy en política nadie puede improvisar. Porque podría caer en la mediocridad.
Pasemos a otro tema.
El escenario electoral de Tamaulipas parece haber sufrido una trascendente modificación en el último fin de semana, tras el arranque de campaña del victorense ALEJANDRO ETIENNE LLANO, quien es evidente -a estas alturas- que va en pos de la gubernatura.
Con toda certeza no vino al Mante por pura casualidad el pasado sábado.
Alejandro Etienne no se manda solo, tampoco. Llegó al Mante con el propósito de exponer sus particulares motivos por lo que quiere gobernar Tamaulipas.
Lo sorprendente es que no le importó ser alcalde de Victoria en funciones; aunque usó el sábado, su día de descanso, para meterse a la campaña de lleno, haciéndose auto promoción.
En poca palabras, Etienne hizo un real destape de sus aspiraciones y eligió el Mante para ello.
Envió un claro mensaje a todos los presentes en su reunión convocada, mismo que empieza a ser digerido, le guste o no a la clase política local y estatal del PRI.
La suya, deducimos, es una aspiración política que aunque legítima, es aparentemente avalada por el gobernador EGIDIO TORRE CANTÚ, a la vista su principal impulsor.
Asunto de que ninguna forma está prohibido debido a que Etienne se auto promovió en sábado, quizás porque el tiempo electoral apremia, y porque el año 2016 está a la vuelta de la esquina.
Ahora bien, es evidente que el status de la cosa política en Tamaulipas ha sufrido modificación repentina. Casi de un día para otro.
Al menos un ambiente de estupefacción permea en medio de las 8 campañas políticas del PRI, en los 8 distritos electorales existentes, mismas que están en pleno desarrollo.
El destape del alcalde de Victoria Alejandro Etienne, quien por su parte ha sido criticado por medidas antipopulares aplicadas en su ínsula, marca un gran parteaguas. Un antes y después.
E indica que las precampañas a gobernador de Tamaulipas en el PRI ya comenzaron.
Así las cosas, en Tamaulipas está puesta en marcha una campaña política paralela, la de diputados federales y la de gobernador. Aunque entre una y otra exista 1 año de diferencia.
Algo inédito en la historia política del estado, en razón de que los tiempos políticos están empatandose en el país. Y en razón de que están emparejándose todas las elecciones en los 32 estados, volviéndose recurrentes.
Y este fenómeno de paralelismo está incluyendo por supuesto a Tamaulipas.
En resumen diremos que todo nos hace suponer que el próximo sexenio estatal no será un sexenio de seis años precisamente, sino un mini mandato de dos años.
Y en este escenario ALEJANDRO GUEVARA COBOS hasta donde él mismo nos ha confesado, simple y sencillamente no entra.
Aunque falta esperar.
Bien, hasta aquí por ahora, nos leeremos pronto.
Aunque antes de despedirnos, abordemos otro interesante tema.
Dicen que detrás del desfile de carritos de ruta antier frente a la alcaldía del Mante está la mano negra (otros la llaman, operación política) del líder estatal del PAN, César Verástegui Ostos, quien aparentemente lo habría hecho tratando de favorecer a Edgar Vargas Arizabalo, su aparente rival.
Aunque su principal objetivo -dicen algunas voces- es perjudicar el resultado de la campaña electoral del candidato del PRI Alejandro Guevara Cobos, quien hasta hoy va viento en popa pese al fuego amigo, mismo que comienza a descubrirse.
A saber César Verástegui opera en contra del candidato del PRI desde El Mante, cosa que no sería noticia, si no fuera porque esa operación política en contra no proviene del PAN sino del mismo PRI.
Aparentemente se trata de gente del centro que tiene interés de que el priista pierda, particularmente en El Mante, pues perdiendo aquí, le derrumban gran parte del sueño.
Y todos saben que su máximo sueño es arrasar, no simplemente ganar.
! Alerta ! ! Cuidado con eso !
¿Qué tan cierto es este rumor? A ciencia cierta no sabemos. Pero será mejor indagar.
Pues por más que tratamos de darle el beneficio de la duda al panista César Verástegui, intentando suponer que no se presta a juegos sucios con el partido político opositor PRI, nos frenamos.
Hay un raro ambiente en torno a la campaña del candidato priista, y que podría estar siendo operada desde la capital. ¿O por qué no, desde la frontera?
Bien, ahora sí hasta aquí. Nos leeremos en breve.
