Ciudad Victoria, (OGP).— El General Maclovio Herrera fue un héroe de la Revolución Mexicana que murió en Nuevo Laredo un 17 de abril de hace cien años. El mercado municipal y una céntrica calle llevan su nombre, en homenaje suyo por haber defendido a la ciudad del asedio de los villistas.
La efemérides es interesante porque un artículo periodístico reciente de Héctor Aguilar Camín cita el libro “La Sangre al río” con la revelación de que la familia Herrera urdió y consumó el asesinato de Francisco Villa, con la anuencia y complicidad del entonces Presidente Álvaro Obregón.
“La Sangre al río” fue escrito este año por Raúl Herrera Márquez, descendiente de Maclovio Herrera, en base a los testimonios de los sobrevivientes de los Herrera Cano, hombres de revolución que fueron exterminados por órdenes de Villa.
La revelación del libro echa por tierra la vieja historia de que el periodista Regino Hernández Llergo había hecho accionar los gatillos con un reportaje seriado que publicó en El Universal en 1922, con declaraciones de Villa que se tomaron en el gobierno federal como una amenaza de volver a tomar las armas en su contra.
Pancho Villa fue muerto a balazos en el año 1923 en Parral, Chihuahua, emboscado en una calle. Siempre se creyó que le quitaron la vida porque podía reunir a 40 mil soldados en 40 minutos, como él lo presumió con Hernández Llergo, para rebelarse contra el gobierno “si no cumple sus promesas de reivindicación social”.
Era mentira. El libro de Raúl Herrera Márquez cuenta la trama real del crimen. Villa y Maclovio Herrera fueron compañeros de armas en la lucha contra Victoriano Huerta, bajo la guía de Venustiano Carranza.
Villa quería seguir en la bola en tanto que Herrera se plegó al dictado de Carranza y su primera Constitución. Eso los distanció definitivamente, pero sin que el Centauro del Norte lo perdonara pues juró acabar con toda la familia, seis hermanos Herrera y su padre.
Villa liquidó a cinco de ellos, incluido Maclovio, a éste en Nuevo Laredo, por su propia mano o mediante emisarios. Jesús Herrera Cano, el sobreviviente, consiguió una entrevista con Obregón en la Ciudad de México, cuando el Centauro estaba retirado a la vida civil, en su hacienda de Canutillo.
Le pidió permiso para lavar la afrenta familiar, que no lo protegieran ni los persiguieran a ellos tras la consumación de la venganza. Cuenta el libro que el Presidente titubeó pero finalmente dio su anuencia.
Regino Hernández Llergo debió tener escrúpulos por creerse él mismo, en aquellos años, que su reportaje indujo la muerte de Villa. El libro pone las cosas en su lugar, aunque no deja lugar a dudas que fue un crimen de Estado, indirectamente.
El gobierno municipal de Nuevo Laredo que encabeza Carlos Cantúrosas Villarreal tuvo comunicación con la familia del General Maclovio Herrera y consiguió que les facilitaran 40 fotografías del militar, que fueron reproducidas a gran escala para exhibirlas a partir del 16 de abril.
Carlos Zúñiga, coordinador del archivo histórico municipal “Juan H. Richer” informó que el Ayuntamiento le rendirá este tributo para que los ciudadanos lo conozcan aún más mediante la reproducción de imágenes suyas, en el inmueble del propio archivo histórico.
Otra efemérides se cumplió ayer: 101 años del nacimiento de Octavio Paz, Premio Nobel de Literatura en 1990.
En temas políticos, trascendió que la ex diputada local de Nuevo Laredo, Rosa María Alvarado Monroy, está propuesta como candidata suplente de la candidata plurinominal Montserrat Arcos Velázquez.
Lo que sigue siendo un secreto impenetrable es la identidad del suplente de Baltazar Hinojosa Ochoa.
A propósito de Nuevo Laredo, el senador panista de Reynosa Francisco García Cabeza de Vaca está perfeccionando su nivel de perversidad pues mandó decir a su propagandista Pablo Cantú Hinojosa, ex presidente interino estatal del PAN, que presentarán una denuncia contra Gustavo Cárdenas Gutiérrez.
Gustavo se registró el sábado en Ciudad Victoria como candidato a diputado federal por el Partido Movimiento Ciudadano, y casi dos mil ciudadanos lo acompañaron a la ceremonia, en las oficinas del INE.
Pablo Cantú Hinojosa anunció que presentarán una denuncia a nombre del PAN contra Gustavo, por supuestos actos anticipados de campaña.
Pero PERO la maniobra está urdida realmente para “tumbar” la candidatura de Laura Zárate Quesada, en Nuevo Laredo, pues un día después, el domingo 29 de marzo, hizo un mitin de más de dos mil asistentes, en las propias instalaciones del PAN.
Como se sabe, García Cabeza de Vaca tiene la pesadilla de que Carlos Cantúrosas Villarreal sea el candidato del PAN a Gobernador, y trata por todos los medios de eliminarlo de la competencia, valiéndose hasta de puñaladas traperas.
Gustavo Cárdenas se ríe de estas amenazas pues sabe que se trata de sólo asustar con el petate del muerto.
En Río Bravo, el flamante enlace territorial Carlos Solís Gómez, Secretario de Desarrollo Rural, consiguió sentar en una misma mesa al presidente municipal Rogelio Villaseñor Sánchez y al diputado local Juan Diego Guajardo Anzaldúa, poniendo en medio inclusive, al Gobernador Egidio Torre Cantú.
Ello ocurrió durante la visita del mandatario estatal a Río Bravo luego de una ausencia de más de un año, para hacer la salutación de año nuevo a la sociedad civil. No le hicieron allí reclamos como en Matamoros.
Pero a su llegada al salón social, un joven empresario detuvo su marcha para exigirle, en tono exaltado, que haga cumplir la ley en Tamaulipas, pues sufrió una agresión y robo en la joyería propiedad de la familia, con la pérdida de mercancía por más de dos millones de pesos.
Entregó Carlos (Charly) González Jiménez una carpeta con suficiente información sobre el atraco.
Fue una buena concurrencia en el Mar-Riber, con representantes de la sociedad aunque el único que habló, después de Egidio, fue el alcalde Villaseñor Sánchez. En una mesa fueron instalados los ex alcaldes Moisés Melhem Kuri, Jaime Sánchez Bravo y Roberto Benet Ramos.
Antes de iniciar la ceremonia, el ingeniero Torre Cantú entregó para el servicio a la ciudad un camión Vactor con valor de cuatro y medio millones de pesos, cuyas llaves traspasó el alcalde al gerente general de la COMAPA, contador público Pedro Ignacio Vázquez Lozada.
El Gobernador estuvo por la mañana en Reynosa (donde hubo otra vez nutridas balaceras, a la misma hora), donde atendió a funcionarios federales de PEMEX y CONAGUA y Gobernación, que patrocinaron obras por más de mil millones de pesos.
Torre agradeció al Presidente de la República Enrique Peña Nieto y a su Gabinete, los apoyos que canalizan a Tamaulipas, especialmente a la frontera, en materia de infraestructura hidráulica.
También el alcalde de Reynosa José Elías Leal se mostró complacido por las obras supervisadas en la planta de bombeo Anzaldúa-Rodhe así como el revestimiento del canal por el cual se rueda el agua, y que con la capa de concreto evitará la pérdida de casi el 50 por ciento del volumen.
Torre y Pepe Elías hicieron luego la inauguración de otro parque de barrio, ahora en la colonia La Cima.
En tanto que en Tampico, el alcalde Gustavo Torres Salinas puso en servicio calles con nueva pavimentación, en las colonias Solidaridad, Voluntad y Trabajo y la Enrique Cárdenas González.
Dijo Gustavo en su mensaje, que el gasto en infraestructura vial lleva un ritmo intenso pues es intención del Presidente Peña Nieto y del ingeniero Torre Cantú, modernizar los circuitos de circulación.
Fueron más de ocho millones de pesos los que se invirtieron en esas pavimentaciones, de acuerdo al recuento hecho por los técnicos, en presencia de vecinos, funcionarios e invitados.
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