Por lo general son amantes del arte dramático aunque mucha gente les ve cara de cómicos, sus discursos parecen sacados de un sketch del Chespirito o Dervez, no se les ve mucha seriedad e incluso la mayoría espera a que el guionista les marque la línea a seguir y hasta el momento de sonreír.
Nadie puede negar que resultan muy buenos teatreros, esa es su especialidad, más cuando están en los reflectores, su tarea es hacer circo, maroma y teatro y con su actuación tratan de convencer a la gente de algo, aunque este muy lejos de la realidad.
Pareciera que estamos hablando de candidatos o de cualquier político de esos que aprovechan los reflectores para hacer show y hasta se inventan una función para intentar hacer su gran presentación e igual se manejan entre lágrimas y risas tratando de convencer al respetable de su buena actuación.
Y aunque para nadie es desconocido que la mayoría de los políticos son bastante teatreros, buenos para la actuación, su capacidad histriónica es inigualable, y son conocedores del juego de la comedia, la farsa, las máscaras y se especializan en hacer shows apenas se presente la ocasión, no va por ahí, aunque parezca.
Cierto es que los políticos se ajustan bastante bien a la descripción, pero cualquier semejanza entre ellos y el tema de hoy es mera coincidencia, porque aunque en estos tiempos solo se habla de política vale recordar que hay cosas igual o más importantes que debemos tener en la memoria.
Hoy es para felicitar a los conocedores de las bellas artes, amantes de los entablados que con su capacidad escénica y riqueza histriónica hacen reír, llorar, reflexionar y soñar al público con su actuación, el 27 de marzo es el Día Mundial del Teatro, a ellos, los teatreros de corazón a aparte de felicitarlos les pido perdón por hacer de su oficio una analogía con los políticos, una mala comparación.
Aunque también hay teatreros buenos, regulares, malos y peores, exacto, igualito que los políticos, la diferencia es que los actores teatrales viven por y para el teatro, en cada actuación entregan al pueblo alma vida y corazón, mientras que los de la clase política solo hacen teatro para vivir del pueblo.
Mañana es el Día Mundial del Teatro, los actores, directores y todos los que gustan de esa bella disciplina estarán de fiesta, claro que tampoco se descarta que uno que otro político que se siente artista se festeje, los acelerados aprovecharán la ocasión para evadir al INE.
Un verdadero actor dice que sólo requiere de tablas para hacer teatro, entre lágrimas y risas muestran a la gente su actuación, tristemente, la mayoría de las veces mal vive porque no hay dinero para estas personas, aun así, el aplauso es su motivación, el reconocimiento les crea ilusión.
Muchos de los políticos aun sin tablas quieren hacer una gran obra de teatro, presentar al pueblo su mejor actuación para ganarse los aplausos y votos, para luego, alimentar sus sonrisas con jugosos sueldos, actos de corrupción que les llenan sus cuentas bancarias y todo eso les sabe muy bien aunque lleve las lágrimas de la su pueblo.
Teatreros, y me refiero a la gente digna que hace teatro, se esmeran estudiando sus guiones, ensayan arduamente para poder subir al escenario y brindar al público su mejor actuación mientras la mayoría de actores políticos la dignidad es algo que no conocen, el esmero no se los han presentado, estudian sus guiones al salir a escena para presentar su mejor farsa y engañar a la gente, al final de la función sólo tienen la rechifla del pueblo por tanta simulación, pero nada les importa si el cheque y poder les alcanza para cubrirse.
En fin, el caso es que para el mundo artístico y las bellas artes internacionalmente mañana se celebra el Día del Teatro, en el terreno de la política lo celebran diariamente, más en tiempos electorales cuando los actores con vestuarios azules, verdes, amarillos, tricolores, o del color que sea, aparecen en escena, con su sonrisa fingida, pero siempre prestos para entrar en acción.
Los candidatos de todos los colores ya se reportan listos, presentaron su pase de entrada al teatro electoral para iniciar la gran función, ensayaron su guion para apenas se abra el telón saltar al escenario para ofertar su mejor representación, los shows estarán a la orden del día, a simple vista, parecen gratuitos y con regalías, pero el público debe de tener cuidado, elegir bien el que quiera , no sea que después los platos rotos tenga que pagar.
Desde hoy vaya nuestra felicitación a todos los teatreros por su Día Mundial del Teatro.
