Madrid (Notimex).- Con la presentación especial de la cantaora de flamenco española Estrella Morente, el Teatro Real de Madrid cerrará 2014 con la presentación de “El amor brujo” de Manuel de Falla, de la que se celebrará el centenario de su estreno en 2015.
En rueda de prensa en el coso artístico de la Plaza de Oriente, la cantaora manifestó su emoción por participar en este espectáculo y expresó que “siento ese colorido, esa flamencura, esa gitanería en lo más profundo de mis raíces”.
Recordó a su padre, el fallecido Enrique Morente y reconocido como uno de los grandes renovadores del flamenco, quien, dijo, “desde chiquita me traía a ver el teatro real para transmitirme la importancia de la historia de la música, del Madrid de los Austrias”.
El Teatro Real ofrecerá cinco funciones, entre el 29 de diciembre y el 3 de enero, de “El amor brujo”, una nueva versión coreográfica de Víctor Ullate para una de las obras cruciales de la música española del siglo XX.
La producción es una revisión de la estrenada en 1994, con escenografía y vestuario completamente renovados y nuevos pasos coreográficos, interpretada por Estrella Morente, el bailaor Rubén Olmo, el ballet de Ullate y de la Comunidad de Madrid, bajo la dirección musical de Josep Vicent.
Para Ullate, esta nueva versión, cargada de fantasía, tiene en su espectro narrativo una presencia más definida del mundo de los muertos, “oscuro y fantasmagórico”, dibujado también en la parte musical con una apuesta rompedora.
Agregó que cuenta con la inclusión del grupo In Slaughter Natives y efectos musicales creados por Luis Delgado para la versión original de la partitura de Manuel de Falla.
Asimismo, el espectáculo incluye también tres canciones populares escritas por el compositor gaditano: “Nana”, “Polo” y “Asturiano”, además de una variación de Paco de Lucía para “José el eterno amante”.
Sobre la participación de Estrella Morente, Ullate aseguró que “su voz es como la de un ángel y su presencia como una pintura de Julio Romero de Torres. Siempre me ha servido de inspiración y por eso decidí unir mis coreografías con las notas musicales que salen de su garganta mágica”.
El director artístico del Teatro Real, Joan Matabosch consideró que “El amor brujo” es una de las obras cruciales del patrimonio nacional español del siglo XX.
Resaltó que esa obra constituye la búsqueda, por parte de Falla, de una nueva simplicidad, que asimismo buscaba Claude Debussy en París, ante la complejidad de las orquestas sinfónicas.
Además, subrayó que la danza era el epicentro de la vanguardia y Falla, como otros compositores, la utilizaron como parte esencial de su obra.
Sobre “El amor brujo”, sostuvo que Falla se inclina por una historia gitana porque para el artista, nacido en 1876 en Cádiz, sur español y fallecido en Alta Gracia, Argentina en 1946, el ser gitano significó pureza, tener raíces auténticas.
