Nos acostumbraron a pagar poco por un servicio que tiene deficiencias y a no exigir calidad; hoy, nos quieren cobrar mucho pero el servicio no ha mejorado en lo más mínimo.
Según consta en medios de comunicación masivos, se ha anunciado un incremento en el cobro de agua potable para el año 2015, y que ronda el 4 o 6 por ciento.
No pensamos que sea algo justo; la Comisión de Agua Potable ha “ajustado” las tarifas argumentando una serie de pretextos que no coinciden con la lógica ciudadana: antes, el cobro por consumo mínimo era el equivalente a 10 metros cúbicos; hoy nos lo presentan como de 12 metros cúbicos, incrementando al doble el cobro, es decir, no se justifica tal aumento.
Se nos dice que es por los costes de producción y transportación del vital líquido. Lo entendemos, pero no concebimos tener que pagar el doble por un se4rvicio que no nos es satisfactorio, más, porque todos vivimos a diario los problemas que ocasiona la distribución.
La ciudad se encuentra plena de tremendos agujeros que son trampas para transeúntes y vehículos por doquier, producto de las innumerables fugas de agua y “veneros” que no dejan siquiera que usted pase sin mancharse de loco por los charcos existentes. Eso, dicen, es culpa de la madre naturaleza que dispuso los veneros en donde se habrían de construir calles y avenidas.
Además, la respuesta a la ciudadanía tiene que ser mediante quejas y pleitos, visitas a las oficinas de la Comapa donde, por lo general nos atienden y ajustan los cobros indebidos, pero al siguiente mes vuelve el inconveniente, por lo que hay que volver a lo mismo. Y eso es todos los meses.
No hay medidores en muchos sitios y por ello se disponen a cobrar los famosos 12 metros cúbicos: ¿quién distribuye que no pone medidores? ¿es culpa del ciudadano?
Nos han argumentado muchas veces ese pretexto, sin embargo, la compra e instalación de medidores es responsabilidad del organismo y no del usuario, a quien se le cobra hasta el último centavo del mismo, pero que, al no disponer de él, tiene que pagar más de 160 pesos porque a alguien se le ocurrió que el consumo mínimo será de 12 en lugar de 10 metros cúbicos.
¿Bajo qué estudio o criterio han hecho esto?
Nos cobran mucho por un servicio que no tiene calidad, y no hablamos de los cortes que se anuncia, porque esos los entendemos: toda obra hidráulica requiere mantenimiento y tiene desgaste que propicia que haya necesidad de cortes del líquido para reponer o rehabilitar la red. Eso, aunque no guste, es algo que se requiere para seguir contando con el servicio dentro de los parámetros de calidad que se necesitan.
Y encima de todo, se anuncia un incremento de acuerdo al índice inflacionario, pero no acorde a los salarios profesionales ni el mínimo siquiera, lo que convierte el aumento en una medida unilateral e injusta que debe ser considerada por quienes deciden a nombre de más de 3 millones de tamaulipecos qué y cómo cobrar.
No pensamos merecer este trato, no como usuarios ni como ciudadanos.
Y en ese sentido, podríamos solicitar a alguno de nuestros representantes ante el poder legislativo que haga un llamado a las administradoras del agua potable para que se ajusten a la realidad de los tamaulipecos, dejando a un lado demagógicas medidas como querer subir precios de acuerdo al índice inflacionario.
Que piensen que quienes pagamos somos ciudadanos convencionales, y que tenemos trabajo y salarios, y éstos, los salarios, no suben en los porcentajes que ellos pretenden aplicar.
Queremos pagar justo por un servicio justo, solamente que nos garanticen la seriedad que merecemos como usuarios, como ciudadanos, como tamaulipecos.
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