Terminó el horario de verano e inicio el de invierno, casi todos los mexicanos el sábado por la noche atrasaron una hora sus relojes para el domingo comenzar sus actividades a tiempo.
La verdad es que mientras la mayoría disfrutaron atrasar el reloj para no salir a la calle con oscuridad muchos políticos lo sufrieron, sobre todo aquellos que desean convertirse en candidatos, ellos no quieren que retroceda el tiempo, al contrario, quisieran que se adelantara y ver la luz ilumine sus futuros.
Bueno, en realidad la luz que quisieran ver adelantando sus relojes sería la que ilumine la lista de candidatos donde aparezcan sus nombres porque, como dijera la abuela, andan que se les cuecen las habas, ya quisieran verse convertidos en candidatos el próximo año, aunque a la gran mayoría de ellos no les alcance para tanto.
Lo peor del caso es que hay quienes sueñan en convertirse en Diputados Federales para luego ir en busca de la gubernatura de Tamaulipas, y se ponen tristes porque saben que si no les alcanza para el 2015 menos llegaran al 2016, así es que de nada servirá que traigan su reloj adelantado y será mejor que disfruten una hora más de sueño.
El síndrome del reloj adelantado afecta a muchos políticos, lo mismo tricolores que azules y hasta naranjas o amarillos que desean sea su tiempo, para nadie es desconocido que en el PRI, PAN, PRD y Movimiento Ciudadano hay personajes que ya se ven en San Lázaro y hasta encampañados en busca de la gubernatura de Tamaulipas.
Con todo y que muchos políticos quisieran adelantar el tiempo, el reloj se atrasó una hora, terminó el horario de verano, lo malo es que con el también termina el “subsidio” en las tarifas electicas, por si no lo ha notado, los recibos de luz en esta facturación ya llegaron con su respectivo aumento.
Así es que agárrese, es solo el inicio, espere a ver cuánto pagará de energía eléctrica allá por diciembre cuando quiera gozar la blanca Navidad y se le ocurra encender las luces de su arbolito, creo que muchos se quedarán a oscuras al pagar el recibo de la CFE, todo eso mientras los políticos que se conviertan en candidatos quieren ver la luz.
El crudo invierno lo sentirán los políticos que no cristalicen sus sueños de convertirse en candidatos, será entonces cuando desearan que el reloj se atrase pero el pueblo es quien más lo resentirá.
Otra cosa que es cierta es que con todo y los aspirantes, aunque tengan calefacción, sentirán que nada les calienta si se quedan en la orilla.
Los del pueblo, los de a pie que es la gran mayoría de la ciudadanía le dará pavor encender un calentador para subir la temperatura del cuerpo y el alma porque el bolsillo quedara frio, no habrá dinero que le dé calorcito, las nóminas pueden registrar un bajo cero, mientras que una que otra cuenta bancaria pueda quedar congelada.
La situación es que terminó el horario de verano y con él acabo el “subsidio” de la Comisión Federal de Electricidad para los usuarios, en pocas palabras, llegó el horario de invierno y no llegó solo, así, mientras eso ocurre, los aspirantes quieren que llegue su tiempo pero antes legaron los aumentos en los recibos de luz.
Llegó el horario de invierno, los aumentos en los recibos de luz hacen su graciosa aparición y al tiempo muchos políticos quieren que se llegue su día de aparecer en las marquesinas luminosas, a ellos no les interesa si terminó o no el subsidio, sus esperanzas de convertirse en candidatos son suficientes para calentarse, lo malo para algunos de los que ya andan encampañados es que allá por diciembre sentirán que nada les calentará, sus sueños estarán más fríos que un pobre sin calefacción.
Lo peor es que muchos esperan que en diciembre el partido de sus amores les caliente sus deseos, les den la buena noticia de que pueden convertirse en candidatos para el proceso electoral 2015 y de ahí buscar colarse al 2016, pero si quedan fríos, fuera de la contienda federal, no habrá nada que les de calor suficiente para buscar la gubernatura, así es que de nada les servirá, en pleno horario de invierno, traer el reloj adelantado.
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