Es el presente mes de octubre el ciclo dedicado a la lucha contra el cáncer en la mujer, y nos da gusto, sin embargo, hay que hacer un “Vive rosa” durante 365 días, cada año de nuestras vidas.
Las principales causas de muerte en México y prácticamente en el mundo son causa de enfermedades que son prevenibles en un porcentaje considerable: diabetes, cáncer, hipertensión, problemas cardiovasculares… son padecimientos que, si nos enfocamos en la prevención y nos empoderamos de nuestras vidas, sería una realidad el ver muchas menos muertes por estas causas.
Los accidentes ocupan también los primeros lugares y aunque mucho es prevención, se debe en gran parte a la estupidez humana al conducir y esas cosas. Las otras enfermedades pueden ser motivo de un punto de atención muy especial.
No queremos ahondar en cifras, porque esas nos las ofrece el Sector Salud en forma periódica, y nos habla de tantos muertos por cada enfermedad, con prevalencias y más: datos que horrorizan por su alto índice de personas que caemos en alguno de estos problemas de salud.
En Tamaulipas se llevó a cabo un evento importante para captar recursos y crear conciencia en la gente sobre el cáncer en la mujer, en sus diversas modalidades, siendo las más importantes el cérvico uterino, de mama y otros, pero se ha enfatizado la lucha contra este problema grave a través de campañas gratuitas que recorren nuestra geografía en busca de personas a las que se les pueda detectar a tiempo, ya que, de suceder lo anterior, se puede conjurar el mortal peligro que implica ser un enfermo de cáncer.
La Secretaría de Salud y el DIF estatal trabajan hace ya mucho tiempo en forma conjunta para hacer frente a este problema de salud que ha visto sus números mejorar gracias a la testarudez con que se llega a la gente: tercos, como siempre, insisten en decirnos que hay que cuidarnos, que hay que checarnos y esas cosas que ayudan a crear conciencia en la población y se ha logrado por consiguiente una mayor asistencia a las consultas y clínicas de mama y CCU, entre muchas otras.
Se está logrando, pero falta mucho, aún mucho por hacer.
En ese sentido, el fin de semana sería significativo: lo hemos escuchado en la televisión nacional donde difícilmente se hace difusión a los programas de este tipo que se llevan a cabo en la Provincia, porque se manejan siempre con la idea de que “fuera de México (DF) todo es Cuautitlán”, como reza aquel ofensivo dicho popular.
Mucho trabajo tienen Salud y el DIF en ese sentido, y es necesario reconocer que se están registrando avances importantes y logros significativos, aunque, insistimos, hay mucho por hacer, porque todavía un porcentaje importante de la población no ha entendido lo trascendente de esta labor.
Pueden muchos pensar que el trabajo no es suficiente: respetable su opinión, pero cuando se vive cerca de una persona que se diagnostica con alguna de las muchas variantes de esta mortal enfermedad, cuando se le ve luchar y desgastarse en todos sentidos tratando de no perder la vida, cuando se hace lo humanamente posible por seguir vivo, se entienden entonces las acciones que se llevan a cabo.
En cada hogar donde vive una mujer que ha sido diagnosticada a tiempo y ha salvado su vida gracias al tratamiento efectivo y oportuno, en cada familia que sabe lo que es sortear este problema de salud, o en cada ser humano que puede decir que ha librado esta desigual e inestable batalla, es donde se sabe que el esfuerzo de la autoridad está teniendo eco en la población, lo que, finalmente, buscamos todos los gobernados por cualquier instancia: que sus acciones nos beneficien directamente y se refleje en nuestra calidad de vida.
Hay que unirse y apoyar la lucha contra esta terrible enfermedad, por solidaridad y corazón, por el espíritu humano que nos caracteriza.
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