En su calidad de militante del Partido Revolucionario Institucional, el ingeniero Egidio Torre Cantú afirmó que lograrán en 2015 el llamado “carro completo”, durante los eventos del fin de semana.
En ese sentido, considera el también mandatario tamaulipeco que tienen los elementos para garantizar la victoria, y apoya su declaración en el trabajo que ha realizado Rafael González Benavides al frente de ese instituto político, y la conformación de un buen grupo de militantes que tienen la encomienda de “ganar por ganar”, en el sentido de poder lograr una victoria contundente, clara y limpia, que es lo más importante.
¿Qué requiere el PRI para lograrlo?
Sin lugar a dudas, lo primero que tendrán que hacer, y que Rafael González ya ha avanzado mucho, es reforzar los comités seccionales, municipales y distritales, de forma tal que exista la estructura que soporte no las campañas –que es lo de menos-, sino el que la gente esté convencida de que los priístas son la opción más adecuada para representarnos en la Cámara Alta.
Posterior al refuerzo de la estructura, en la que, como dijimos, se sigue trabajando intensamente, y que hemos visto consignado el recorrido del dirigente estatal en los municipios para dar posesión a quienes serán responsables del próximo triunfo, sigue lo que se torna a veces no un poco, sino mcho muy difícil: la elección de los mejores hombres que garanticen dos cosas principales: la victoria en primera instancia, y una buena representación popular: que no vayan a cobrar por levantar el dedo y que sean congruentes con las necesidades de los ciudadanos, logrando ser verdaderos gestores de cada uno de nosotros.
Hay que recordar que en sitios como Oaxaca y Puebla, se equivocaron, aunque parece que fue para bien del PRI, ya que sus precandidatos rechazados buscaron la candidatura por el PAN, ganaron y han hecho el más grande de los ridículos, mostrando la tibieza y sucia forma de llevar una administración.
Si no, pregunte a los oaxaqueños por Cué y su falta de carácter y voluntad política para apoyar a sus conciudadanos, logrando apoyar a delincuentes disfrazados de profesores, por miedo o incapacidad, vaya usted a saber.
El caso es que Tamaulipas aún tiene un amplio dominio del PRI en las elecciones locales; de hecho, nadie se explica la manera en que gente tibia, falta de carácter, voluntad y oficio político pudo ganar, aunque hay varias teorías, que poco a poco González Benavides ha analizado para lograr un resultado a la altura de los tamaulipecos.
De que no será fácil, lo saben todos ellos, y será entonces cuando, sin atender a sus absurdas ambiciones personales o aspectos meramente individualistas, deberán trabajar como un grupo, una fórmula única y sobre todo, un partido que quiere recuperar esos espacios que les quitaron de mala manera por diversas circunstancias, y que deberán recuperar para darnos a cada uno lo que queremos recibir.
Se espera un más intenso trabajo de parte de la estructura priista, en la que se ha incorporado a gente experimentada y valiosa para cubrir los distintos sectores sociales, y se ha procurado tener mayor intervención de los militantes, escuchar a los ciudadanos, que resulta fundamental, para entonces, formular un plan de trabajo acorde, como dijimos antes, a nuestras necesidades ciudadanas.
Finalmente, cada legislador es empleado de los tamaulipecos, y debiera entender su función: no se trata de dar un premio a la militancia o al tiempo en que se han quedado inscritos en las listas partidistas, sino en ser gestores, cumplir y dejarse de demagogos discursos: los tamaulipecos esperamos resultados y queremos ver algo positivo para nosotros.
Queremos que se conviertan en nuestra voz, y para eso se prepara el PRI, para que todos tengamos una adecuada representatividad.
Que así sea, lo deseamos, y esperamos sinceramente que haya cambios importantes en el México de todos, a través de sus representantes populares. Por lo pronto, el PRI asegura carro completo en la voz de Egidio Torre Cantú.
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