La violencia en el entorno escolar, el acoso o bullying, es un mal que se ha venido incrementando en los planteles educativos de México, con resultados cada vez más funestos, como el reciente caso del fallecimiento en Ciudad Victoria de Héctor Alejandro Méndez Ramírez, quien cursaba el primer grado de secundaria, y que muriera a consecuencia de heridas infringidas por compañeros de clase.
México presenta el primer lugar mundial en casos de acoso escolar, y a lo largo y ancho del país se replican estos casos, cuya incidencia aumenta vertiginosamente. Sin embargo, la violencia escolar no es un fenómeno aislado; no es sino parte del delicado equilibrio social, el cual se ve afectado por los duros momentos que atraviesa nuestra patria, en medio de cambios, violencia e inequidades.
Por ende, no es un asunto que se arregle en el mero ámbito escolar, ni mucho menos es responsabilidad aislada ni de la escuela ni de la familia. Somos todos responsables en estos fenómenos, pues la violencia sostenida es un acto que se aprende mediante el ejemplo, del mismo modo que se educa para el respeto y la concordia, con acciones que demuestren que la paz es una opción.
Los padres del pequeño Héctor, generosamente accedieron a donar ambos riñones, los cuales siguen dando salud a sendos pacientes, quienes en el Hospital Regional de Alta Especialidad de esta ciudad capital, recibieron de Héctor y sus padres, el magnífico regalo de vida.
No creo que haya culpables, ni que sirviera de algo aplicar castigos: nada de eso vuelve el tiempo atrás ni brinda consuelo al corazón de una madre. Antes bien, creo que lo que debiera haber son responsables; responsables de actuar de manera valiente, responsable, de enmendar errores y predicar con el ejemplo, responsables para entender que el cambio siempre será personal, para poder convertirse en un cambio social.
Tamaulipas y México merecen la paz: ofrezcámosla con nuestras acciones día a día.
Ya sabe: eso digo yo…
LA CAJONERA…
1.- LA FRASE: “Es nuestra convicción y nuestra práctica que para rebelarse y luchar no son necesarios ni líderes ni caudillos ni mesías ni salvadores. Para luchar solo se necesitaban un poco de vergüenza, un tanto de dignidad y mucha organización”. Sub Comandante Marcos, en su despedida.
2.- UN TROZO DE POESÍA: “¿En perseguirme, mundo, qué interesas?/ ¿En qué te ofendo, cuando sólo intento/ poner bellezas en mi entendimiento/ y no mi entendimiento en las bellezas?/ Yo no estimo tesoros ni riquezas,/ y así, siempre me causa más contento/ poner riquezas en mi entendimiento/ que no mi entendimiento en las riquezas./ Y no estimo hermosura que vencida/ es despojo civil de las edades/ ni riqueza me agrada fementida,/ teniendo por mejor en mis verdades/ consumir vanidades de la vida/ que consumir la vida en vanidades”. Sor Juana Inés de la Cruz.
3.- MISCELÁNEOS: El tiempo pasa y muchas cosas se pueden aprender a lo largo de 16 años… Así le pasó a Shakira, pues desde su canción “Inolvidable”, donde se declaraba negada para el soccer, hasta “LalalaBrazil”, ciertamente la diva del Pop ha aprendido bastante acerca del juego, sobre todo después de su matrimonio con el astro del balompié Piqué, quien seguramente le enseñó todo lo que había qué enseñarle...
